Desde el ahorro hasta la limpieza del hogar, “El manual para el adulto funcional” es el libro de cabecera para todos aquellos que están llegando a la adultez y no quieren morir en el intento.
Como buena Virgo, María José Castro – AKA Lady Ganga – es una queen de la organización. Por eso no es de extrañar que la Periodista, podcaster e instagramer dé tips por excelencia tenga su propio libro sobre cómo atravesar el complejo camino del adulting… ¿Acaso existe en Chile un adulto más funcional que ella? Connie Achurra y pare de contar. Luego del éxito de “La guía para la vida de las amikas”, coescrito junto a Valeria Luna -su compañera de podcast en “Con la ayuda de mis amikas”-, Castro lanzó el pasado 02 de enero “El manual del adulto funcional”, un compilado de datos útiles y ultra necesarios sobre los diversos temas que deben afrontar quienes ya dieron o van a dar el paso a la independencia, porque como la misma autora detalla al comenzar el relato, “la vida se pone difícil después de séptimo básico”. Sí, tenemos muchas pruebas de aquello y cero dudas.
“Ahora es distinto a lo que era para nuestros papás, partiendo por cómo nos vemos que es algo que ya no importa, puedes ser adulto funcional teniendo el pelo de colores, vistiéndote como quieras y teniendo tatuajes“, asegura Castro.
-María José, cuéntame ¿cómo te sientes tras el lanzamiento del libro?
¡Súper bien! Ha sido muy abrumadora la recepción del libro, estoy contenta. Se lanzó ahora en enero y la preventa de diciembre fue súper buena, la gente lo está empezando a leer, eso era lo que más nervios me daba y hasta el momento ha sido positivo el feedback. También comenzamos con esta dinámica que por la pandemia no tuvimos con el libro de Amikas, como poder firmarlos y quizás ir a ciertos lugares.
-¿Por qué el libro está enfocado en el adulto funcional? Al ser shopping blogger quizás tus seguidores esperaban algo sobre compras…
El tema de ser funcional siempre me ha movido, desde muy chica. Vengo de una familia donde me enseñaron a poder valerte por ti mismo. Desde hace años me llama la atención el tema del adulting que se habla harto en muchos lados, o en Twitter que te dicen “que poco funcional”. A pesar de ser conocida como bloguera o instagramer de compras, también trato de meter tips para la vida en general, así que el tema se me hizo natural.
-¿Cómo fue el proceso de escribirlo en pandemia, tu visión de algunas cosas cambió?
Más que el escribirlo en pandemia, mi desafío fue escribirlo en solitario. Mi experiencia anterior fue con Valeria (Luna), y a pesar que ese libro no es tan serio y está hecho para la comunidad Amikas fue fluido, nos aislamos en un lugar y salió casi el 80% porque pimponeábamos ideas, teníamos un ritmo; ahora me enfrenté al “ok, cómo avanzo, cómo lo hago, cómo empiezo”. Como buena Virgo, tuve el libro organizado desde un inicio pero me costó mucho partir y, ¡lo escribí en tiempo record! Me demoré poquito.
-Tal como mencionaste, en Twitter o Instagram hay cierta obligación social por ser adulto funcional, pero según tú ¿siempre hay que serlo?
Creo que uno no nace siendo adulto funcional y también creo que tenemos una visión estructurada de lo que es serlo. Cuando empiezo el libro, lo primero que digo es que debemos tener claro qué es ser un adulto funcional. Ahora es distinto a lo que era para nuestros papás, partiendo por cómo nos vemos que es algo que ya no importa, puedes ser adulto funcional teniendo el pelo de colores, vistiéndote como quieras y teniendo tatuajes. Por otro lado, ser adulto funcional es enfrentarte a las tareas básicas de la vida y sortearlas con responsabilidad, estamos en una sociedad entonces implica cuidarse uno mismo y saber lavar tus calzones y calzoncillos, pero también tratar a los demás con respeto, cariño y cuidado.
-¿Cuál es tu rasgo más funcional?
Soy buena para la organización en general y también para la limpieza. Hay un tema de control igual pero creo que esas dos cosas me caracterizan mucho, las sorteo muy bien. Me parece que el capítulo de limpieza es el más largo, me costó resumir (ríe).
-Este es un libro con mucho humor y referencias para millennials y centennials. ¿Por qué tomaste este tono en la redacción?
Creo que lo tomé pensando en quienes leerían este libro o a quienes se lo van a regalar, y que son las personas que ahora van a ser adultos. Lo veo en mis hermanos más chicos o mi sobrina que tiene 19 años. Para mí el humor es algo que conecta, no soy comediante pero me considero chistóloga y no solo en este libro sino en todas las cosas que hago. El hablar un tema que a lo mejor puede ser un tanto aburrido, con humor suena entretenido y dan ganas de seguir leyendo.
-¿Podría haber una segunda parte?
Nada concreto hasta el momento, pero siempre tuve claro que quería hacer un libro sobre ser adulto y eso implica muchos temas. Acá hablo de trece y estoy clarísima que dejé muchos muy importantes afuera, desde la vida de oficina hasta las cosas automotrices. Me encantaría seguir desarrollándolo, ahora que ya tengo lo que me costó al principio, como el tono o la estructura.
¿ACASO AMIKA?
-Recuerdo que en 2016 te entrevisté y me contaste que entre tus planes estaba hacer un podcast y hoy “Con la ayuda de mis amikas” es unos de los más escuchados de Chile. ¿Qué te parece este fenómeno, lo sientes como un sueño hecho realidad?
¡Te juro que trato de acordarme de qué cabeza de pescado te dije! (ríe). Pero más que un sueño hecho realidad, se ha cumplido algo que jamás imaginé: poder hacer un medio de forma independiente y trabajar dentro de mi profesión sin tener que estar bailando al ritmo de los medios tradicionales; eso es un regalo que voy a valorar por toda la vida.
-La comunidad Amikas crece día a día, ¿cómo te sientes con el cariño de la gente?
¡Es increíble! Cuando grabamos estamos solas, muertas de calor, con el gato y en un comienzo cuesta asimilar que lo escuchen miles de personas, hasta que ves las estadísticas. Para mí la recepción más linda es cuando llegan mensajes como “estaba súper triste pero escuche el podcast y durante ese rato me sacaron de esa mala onda”. También conocer a quienes nos escuchan; algo que me ha dado mucha pena de la pandemia es dejar los shows en vivo. Me gustaría que este 2022, si las cosas mejoran, se puedan hacer.
-¿Cómo se identifica a una amika?
Es difícil porque somos súper transversales, a veces nos dicen “yo soy amika” y tienen 13 años, y tú dices “Dios mío, qué le estoy enseñando a esta niñita” (ríe), o también nos escuchan señoras mayores. Creo que un amikx – porque no son solo amikas-, es una persona que tiene mucho sentido del humor, que le encanta el cahuín y la farándula y que no reniega de eso; pero también está interesada en lo que pasa en su país, desde el cahuín del Potro Cabrera hasta todos los entretelones de la elección presidencial.
-Suelen identificarse cuando hacen una referencia al podcast y alguien pregunta, “¿acaso amika?”
¡Sí! Me encanta que la pregunta sea “¿acaso amika?”.
-Y este 2022, ¿se vienen cositas?
Siempre se vienen cositas, no puedes estar en Internet diciendo que no se vienen cositas, porque aunque no tengas nada planeado siempre pasa algo; es el ritmo de las redes, un poco frenético. Seguimos con el proyecto Amikas, estamos felices de ser parte de Spotify Exclusive. Para nosotras fue un tremendo logro y espaldarazo a lo que estamos haciendo, y ojalá que las cositas que se vengan sean los shows en vivo, te juro que ese es mi objetivo.
Fotos: @monica_molinab y @planetadelibroscl
