Hace unas semanas nos invitaron a ser testigos de la función de prensa de Sayen, la película inicial de una trilogía chilena producida por Fábula, de los hermanos Larraín que puede ser vista en Prime Video. La historia sigue a la primera heroína de acción mapuche, interpretada por Rallén Montenegro, en una historia llena de intrigas, acción y otros actores como el popular Arón Piper. Luego pudimos acceder a una conferencia de prensa donde conocimos a Muriel Parra (@murielparradiaz), vestuarista con una larga trayectoria en producciones nacionales y un rol importante haciendo el vestuario de, por ejemplo, Una Mujer Fantástica (2017) y Los Espookys (2019). Muriel se sumó nada menos que a la Academia de Artes y Ciencias (de los Oscars) en 2021, y ha recibido premios como el Fénix a Mejor Vestuario por “Neruda” en 2016.
“Año ’90; estaba en Tercero de Arte de la Arcis y Claudia Robles -quien ya trabajaba ya en vestuario-, necesitaba una Asistente. Me ofrecí y trabajé cuatro años con ella, fue hermoso. Luego comencé a trabajar sola y lo hice harto tiempo junto a Cristián Galaz; mi primera película fue “El Chacotero Sentimental”. Ese fue mi súper comienzo en el cine”, nos cuenta Muriel.
Tony Manero y Neruda, dos producciones anteriores de Muriel.
-Si hablamos del proceso que se esconde detrás de idear el vestuario para un personaje, ¿cómo vas construyendo su estética? ¿Tienes libertad para hacerlo o vas con las direcciones determinadas del director?
La verdad ese proceso no está tan escondido porque trabajamos en equipo creativamente todos; es un espacio, un ambiente fundamental que es igual de fuerte que lo que se ve por la pantalla. Tengo un método que pasa de la lectura al guión, las primeras ideas. La libertad está en lo que uno quiere para todo lo que hace. Si no coincide la visión del director con la mía hablamos hasta llegar a un punto que sea inspirador para él y también para mí.
El Chacotero Sentimental y Una mujer fantástica.
-Tu primer trabajo oficial (que sale listado en IMDB), fue co crear el vestuario para la clásica “Sexo con Amor“. ¿Qué recuerdas de esa experiencia?
En “Sexo con Amor” está la Fran Marshall, a quien invité a trabajar en vestuario. Con ella estuvimos juntas también en “El chacotero sentimental”. Fue una súper linda experiencia, como las primeras experiencias de cosas que a uno le gustan mucho y que son nuevas, inspiradoras. Como fue hace harto tiempo atrás aún no se vivía el set como se vive hoy, mucho más profesional, concentrado, con tiempo. Trabajábamos conviviendo más como equipo, las decisiones eran distintas, los tiempos de actuación son diferentes y tanto Cristián Galaz como Boris Quercia son directores de actores, entonces aprendí un montón. Son dos personas que respeto mucho así que esa etapa es como la base de mi comienzo; estoy muy agradecida hasta el día de hoy.
Parte del vestuario de Muriel para Los Espookys.
-“Los Espookys” ha sido ampliamente alabada sobre todo en cuanto a su estética. ¿Cómo ha sido para ti participar de esta historia tan original y tratar de crear esos verdaderos universos de estilo?
Qué increíble lo de Espookys; amo muchísimo. Ha sido un súper viaje estético, de personas, lo que grabamos, etc. Mucho estilo, muy original trabajando muy a la par con Julio Torres, a quien le revisas el Instagram y te das cuenta de todo lo que eso significa, jaja. Es muy interesante lo vivido con esta serie, hasta dónde pude experimentar y lo fascinante de ser libre proponiendo, que se nota en el trabajo. Bajo la mirada de HBO, Julio, Ana y Fred enganchamos creativamente y ellos te dan libertad. Ana Fábrega y Julio Torres -creadores-, tienen el panorama muy claro, son libres de crear y libres de mente, se nota en sus ideas. Uno se acerca a eso y es fascinante. Esa experiencia ha sido increíble para mi y también el darse cuenta que el trabajo de los técnicos chilenos tiene muy buen nivel; soy bien majadera en recalcar esto pero siento que es un bastión que está conmigo y es cierto. Pasa lo mismo ahora con Sayen: las ideas se llevan a cabo. Hay técnicos muy buenos, de excelente nivel profesional.