A Tatiana Oñate le gustaban tanto los zapatos marca Solarte, que cada vez que su mamá viajaba desde Colombia a visitarla a Santiago -donde vive desde 2016-, le pedía que le trajera un par. Hasta que la gente que conocía empezó a preguntarle por los llamativos mocasines y zapatos tipo Oxford con cintas y otros accesorios que usaba, y se le ocurrió que podía traer más. Detrás de la cámara, Tatiana cuenta la historia de cómo trajo la marca colombiana a Chile y cómo, junto a su pareja, se convirtieron en microempresarios y diseñadores.
El 1 de abril del año pasado hizo el primer encargo al por mayor: fueron cincuenta pares de zapatos. En diciembre del año pasado ya eran 270 los pares que encargó. Como el negocio empezó a ir bien, se comunicó con la fábrica en Medellín y pidió personalizar los pedidos, para traer los que las clientas principalmente pedían. Es ella misma quien diseña lo que quiere y lo pide a la fábrica en el país cafetero.
Además, Solarte es una marca que se define como vegana. Y Tatiana explica por qué: “A mí me llamó mucho la atención que se presentaran como marca vegana, porque no se veían como típicos zapatos de plástico. Entonces averigüé y efectivamente usan un PVC de altísima calidad y el trabajo es tal que se pueden conseguir diversas texturas, como si fuese tela, una simulación de cuero, uno como de gamuza. Parecen un zapato de cuero, pero no lo es, y lo mejor es que conserva la calidad de un zapato de cuero, es decir, no transpira el pie y las plantillas que usamos son muy blanditas y cómodas”, cuenta.
Dentro de las principales características de los zapatos es que tienen una punta redondeada en un solo color, y luego el calzado va fluyendo hacia distintos colores o texturas. Hay unos que simulan el charol, y otros un animal print. Asimismo, se pueden intercambiar los flecos que usan algunos modelos por otros colores, así como los cordones o cintas que traen. El pack de personalización también lo vende Tatiana.
Y aunque al principio las clientas pedían principalmente zapatos en colores más planos o en colores más formales, “cada vez se atreven más a innovar en colores fuertes, o con texturas poco tradicionales. El zapato rojo, por ejemplo, es uno de los favoritos de mis clientas”, apunta. Varios clientes hombres le han pedido que también traiga modelos masculinos. Eso, cuenta Tatiana, está en el tintero y pronto podría haber novedades. En abril Tatiana sufrió el robo y secuestro de su cuenta de Instagram, pero en vez de bajar los brazos, decidió abrir una nueva cuenta y comenzar desde cero en @mundo.solartechile.