Su carrera comenzó como varias más que hemos visto: era la niña que aparecía en series de TV estilo Disney y de a poco en películas, aunque últimamente su fama va de la mano de su cuenta. Porque la actriz Rowan Blanchard se ha convertido en una especie de icono de moda original, que cruza el estilo atrevido y típico de las famosas guiadas por estilistas para dar con una mezcla entre camp y vintage.
Lleva corsets de Vivienne Westwood, tangas bajo pantalones rebajados al estilo de la década del 2000, el pelo bien corto y no teme en mostrar sus combinaciones en Instagram. Además de su imagen, Blanchard ha sido reconocida como una activista por la moda sustentable: la mayoría de sus looks, además de aquellos que lleva como embajadora de Miu Miu, son ropa vintage. “No quiero que me etiqueten como activista. Es difícil querer hacer un cambio pero al mismo tiempo mantenerse en el mundo mainstream de Hollywood”, aseguró en una entrevista a Elle.
Con tan solo 14 años, la protagonista de Girl Meets World se definía por ese entonces como queer. “No me gusta ese sistema binario que te encasilla como heterosexual o gay”, le decía a la revista Cosmopolitan, en algo que sin lugar a dudas llamó la atención ampliamente. Y con cada una de sus decisiones, Rowan se ha ganado la admiración de su generación, una que definitivamente parece más inclinada a la honestidad que a los ídolos fabricados de declaraciones estudiadas y aprobadas por Hollywood.
Fotos: Instagram.