Lo que van a escuchar es pop pegajoso, con letras que sean simples, pero que tienen un cuestionamiento a un orden específico. Mis letras hablan desde un cuestionamiento a las nociones del amor romántico, por uno de clases; que ser pobre y cola no es lo mismo que no serlo. También, en el caso de mi canción Rebelión, de cómo encontrar amor en estos tiempos revolucionados en los cuales todo está cambiando y se confunde la libertad sexual con el consumo de cuerpos, sin responsabilidad afectiva. No digo que uno tenga que amar a alguien para tener sexo, pero sí estar consciente de que estás con otra persona teniendo intimidad.
– La cosificación del sexo que ha traído Grindr, por ejemplo…
De hecho la canción dice ‘de noche abro la máscara amarilla’ y me refiero a Grindr. Finalmente, creer que el sistema económico, que es neoliberal y capitalista, no permea en nuestras relaciones interpersonales, es super inocente. Estamos en tiempos de amor líquido; en la época de la inmediatez, entonces el buscar sexo, una relación, sin ningún tipo de esfuerzo, al alcance de un tap del celular, es la tónica de ahora.
Pero también hay muchos grupos de la disidencia que cuestionan esto. Es repensar las formas en cómo nos relacionamos. Y no todo tiene que ver con el consumo, sino con la construcción de la realidad. Independiente del nombre que lleve: la pareja monogamica, lo heterosexual, los proyectos de vida que uno asocia a una pareja. Tenemos la libertad de poder decidir qué tipo de relación quiero tener con otra persona de forma consensuada.
– Hablabas de discriminación, más allá de la del hetero a lo gay, hay discriminación dentro de la misma comunidad, de la cola pobre y la cola rica, del gay gordo con el flaco, ¿cómo ves a la propia comunidad en deconstruirse a sí misma?
Primero hay que identificar bien el diagnóstico del problema. Personalmente, creo que tiene que ver con cómo muchas personas ven en una sociedad machista, neoliberal, capitalista, una forma de validación. La cola que es arribista, que intenta ser blanca, lo que intenta es parecerse lo más que pueda a lo hegemónico, para disminuir la cantidad de discriminación que recibe. Y cuando uno replica esas conductas, repite ciertas conductas que son opresivas hacia la misma comunidad, de forma consciente o inconsciente.
No sé si lo escrito en el papel o los representantes que escogimos ahora van a hacer el cambio al 100%. Creo fielmente que lo más potente es la organización social, que las personas entiendan que no necesitan una ley para dejar de discriminar. Ahora tenemos matrimonio igualitario y uno podría casarse y nos van a seguir pegando en la calle. Yo soy profesor de profesión y pongo las fichas 100% en la educación. La legislación es un colchón, pero la prevención no la hace una ley sino que la educación; no solo la formal sino también la informal. No quiero sonar derrotista; sí creo que en este nuevo ciclo hay un Chile distinto y van a ocurrir cosas que no podían ocurrir porque habían bloqueos políticos. Y eso lo agradezco muchísimo.– ¿Qué es “Error 404”, tu último single, ¿cuál es el error?
En verdad salió de la nada. Me estaba duchando y se me ocurrió la melodía y el coro y salí, agarré el celular, empecé a grabar. La canción es parte de un EP mucho más largo que se llama Príncipe.
– ¿Por la disco Príncipe de Bellavista?
No (risas). Tiene que ver con la idealización de las personas al momento de relacionarse sexoafectivamente. Soy una persona que en su vida ha tendido a idealizar mucho a las personas, como un príncipe. Ahora ya no. Tanto (más risas). Todos los días es un proceso en que uno va deconstruyéndose.
Error 404 es cuando tu dices ‘te aguanté 403 veces’ y yo sé mis límites. Al error 404, al igual que el error de Internet, cuando te busco en mi cabeza y en mi corazón, ya no existes. Así que cuida lo que tenemos, trata de ser responsable conmigo. Eso también habla de las experiencias que usualmente se tienen en el amor en una sociedad como la nuestra.
– ¿Y de lo audiovisual del video, qué me cuentas?
Quisimos politizarlo mucho más todavía. Y lo que hicimos con la directora Katherina Harder, una cineasta iquiqueña que vive en Barcelona y junto a Pablo Fattori, quien es director de arte del videoclip, nos juntamos y decidimos que íbamos a usar estos dos dispositivos de poder, el Estado y la Iglesia. Son quienes históricamente han reprimido a nuestra comunidad y quienes me raptan, me llevaban al pasado y tratan de borrarme los pensamientos y sentimientos homosexuales.
– Hagamos un spoiler: no lo consiguen
Noo, no lo consiguen. Estéticamente está inspirado en el retrofuturismo de Gucci, un poco en Austin Power. Y cuando estoy secuestrado llega este escuadrón a salvarme, donde está la Emilia Schneider, la Titi Bernal, Neon, quien es une chique no binarie de la escena ballroom y Una típica Francisca, que es una camiona, cantante, abiertamente lesbiana. Y llegan les cuatro a salvarme.
Tiene un rol educativo. Muches de nosotres nos hubiera ayudado caleta haber visto estas representaciones en los libros, películas, videojuegos, en las canciones, para poder saber dónde uno está parado. Yo me asumí como persona no binaria hace dos años, pero no tenía idea lo que era hasta que empecé a leer, a ver, a escuchar experiencias de gente no binaria. Es una visibilización política de nuestras demandas y de educación, de decir “vivimos, respiramos, existimos y aquí estamos”.
