Entrar a la cuenta de Instagram de Mahmood– el cantante italiano de raíces egipcias que ganó el segundo lugar de Eurovisión 2019-, es una explosión de estilo desenfrenado. El artista de 28 años no teme mezclar prendas, tomar las tendencias y apropiarse de ellas, impregnándoles su sello único. Basta un post con una imagen de su infancia donde luce una camiseta con una foto de Leonardo DiCaprio estampada, para entender que su relación con la moda es innata. Por eso, ha destacado por vestir sin miedo al brillo, los metalizados, el patchwork, las transparencias y la cuerina, desafiando la heteronorma y los cánones arcaicos sobre la masculinidad.
Camaleónico, puede pasar de un total black a un look clásico y luego sorprender con extravagancia, una mezcla que lo hace impredecible e hipnotizante. Y por eso, no podríamos definirlo en un solo estilo: ¿Urbano? ¿Normcore? ¿Glam? ¡Imposible! Tiene un poco de todo y lo amolda a su cuerpo en la medida justa. Porque entiende la importancia de la moda, la cual usa como una extensión de sus movimientos al bailar las melodías de sus canciones contestatarias, esas que él autodenomina moroc-pop.
En 2019, la revista GQ lo llamó el participante mejor vestido de Eurovisión de aquel año. En esa oportunidad, lució en su mayoría prendas de Davi Paris, un diseñador italiano formado en el Istituto Marangoni de Milán. Hoy, posa con soltura para las cámaras de las publicaciones de moda más importantes del mundo, enfundado en firmas de lujo como Versace, Burberry, Comme des Garçons y Balmain. Esas mismas marcas mezcla con cotidianidad junto a The North Face o Lacoste. ¡Ah! Y por cierto, también es rostro de Adidas. Sin duda, el vestuario es una de las formas que usa para expresarse artísticamente, y es que simplemente, Mahmood lo entendió todo.