Colaboración desde Barcelona por Andrea Pinto.
El mundo del diseño es algo relativamente reciente en las vidas de Juliana de Luca y Angélica Eriksson. Juliana, que estudió derecho y Angélica literatura, llegaron al diseño casi como si se tratara de un impulso natural, aunque no lo hubieran previsto. Cuando ambas llegaron a Madrid, lugar donde se conocieron, se dieron cuenta que podían reinventarse ya que estaban fuera de sus espacios originales. Empezaron entonces a hacer cosas juntas casi por afición, como restaurar muebles de la calle o re diseñar habitaciones de amigos, todo de una manera muy espontánea hasta el punto que decidieron formarse y dedicarse al diseño, montando su propio estudio: Escandinavo Tropical.
“Como siempre estábamos con la broma de que nuestro estilo era “escandinavo-tropical”, y decidimos quedarnos con ese nombre. Todo muy espontáneo”, y es que el nombre del proyecto nace de lo que literalmente son sus creadores: Juliana de Luca es brasileña, mientras que Angélica Eriksson es sueca. Todo su trabajo está basado en la mezcla insólita de sus culturas, dando vida al concepto que desarrollan a diario: “inventing realities”; ambas buscan explorar la tensión entre lo real y lo imaginario para desarrollar nuevas ideas de diseño.
La belleza para ellas puede ser tomada como algo frívolo si se mira desde un aspecto estrictamente estético, pero el valor que tiene y el impacto que produce lo bello, está justamente en la emoción que es capaz de despertar y mover, sea cual sea su naturaleza. Para crear, las chicas normalmente mezclan sesiones muy libres de brainstorming con investigaciones más concretas sobre temas que les interesa desarrollar. En general es una locura, una especie de transe que sólo termina cuando dan con la idea. La música brasileña ayuda, ya que es un vínculo emocional y creativo muy importante entre las dos.
Escandinavo Tropical reúne proyectos en distintas áreas del diseño, y según ellas no se identifican con un área en específico. Ya han realizado proyectos muy distintos: diseño de productos, de interiores, de logos, de packaging y dirección de arte.
Conocimos más profundamente su último trabajo, “From Óscar to Heaven“ y en la galería de imágenes puedes conocer el resultado. Re inventaron el Óscar Room Mate Hotel, ubicado en Madrid, y para las escaleras que llevan a la terraza del hotel, se imaginaron subiendo unas escaleras que llevaran al paraíso, por lo que diseñaron unos enormes papeles murales que jugaban con la estructura del edificio y que recreaban una especie de Jardín de las Delicias. Al subir por los escalones, percibes la sensualidad, la exuberancia y un cierto toque provocativo que evocan los cuerpos de Adán y Eva y una frondosa decoración vegetal con plantas y granadas.
“Vivarium” fue oro proyecto que también tuvo que ver con revestir escaleras. Para la feria Casa Décor, Juliana y Angélica se inspiraron en todos esos animales exóticos que los europeos traían de los viajes alrededor del mundo, pero recreado como si fuera un lugar fantástico que obedece sus propias reglas.
Estos dos trabajos nacen como el resultado de una reflexión acerca de lo que el antropólogo Marc Auge clasifica como “no lugares”; espacios de transición que son como agujeros negros que nos llevan del punto A al B, pero donde no ocurre nada… ¡hasta ahora!
Por último está el proyecto “#CharoDice”, una vídeo – instalación interactiva que crearon para Room Mate Alicia durante el festival de diseño DecorAcción, con la intención de alejarse un poco de la idea del escaparatismo que abundaba en el festival y para probar algo que hiciera que la gente dialogara con lo que estaba expuesto. Al estar en el Barrio de las Letras, querían que fuera algo relacionado con la cultura española, y así, mezclaron la idea del oráculo, con los refranes españoles y la tecnología, creando Charo, un oráculo que respondía las preguntas de los asistentes con refranes españoles a través de Twitter. Estamos seguros que nada detendrá a estas dos chicas.
