Por mucho tiempo, fueron sinónimo de liberación y baile gracias a la imagen clásica de las flappers en los años ’20. Acompañaron sus vestidos, se movieron al ritmo de su desenfado y también aparecieron ligados a los trajes de noche que evocan el glamour de la era del jazz. Los flecos parecen hacer su aparición en propuestas de cada cierto tiempo, pero nunca tanto como en las que llenaron las pasarelas de la temporada F/W 2020: casi cada diseñador incluyó un look que mantenía estos detalles en trajes y vestidos.
¿A qué se debe este resurgir con tanta fuerza? Las pautas de tendencias dictadas por las agencias informativas como WGSN, tienen como consecuencia una que otra homogeneidad de las propuestas; colores, texturas o un concepto en general, no hay estilo que se salve. Aunque también podría ser el propio sentir histórico del contexto: estamos frente a una época de crisis que va más allá de un momento y que se propaga con consecuencias por todo el mundo, tal como alguna vez lo fueron las guerras mundiales. Precisamente bajo esa línea, las flappers y sus flecos se desataron apenas se sintió un momento de paz, el cual siempre fue amenazado, tal como hoy, por alguna problemática generalizada.
Y vemos lo anterior en diferentes diseñadores, de distintos orígenes: desde Oscar de la Renta en Nueva York, pasando por Alberta Ferretti en Milán hasta llegar a Burberry en Londres. Aunque nos falta París, ya hay ejemplos contundentes que los flecos llegaron esta temporada para quedarse.
Fotos: Runway.
