Durante los años ’80, la moda avant garde no solo provenía de los japoneses. Junto a Rei Kawakubo, Issey Miyake y Yohji Yamamoto, se empinaba otro grupo de creativos que inventaron sus propias reglas de estilo, los cuales tenían sede en Amberes, Bélgica. Los Antwerp Six eran los diseñadores que rompieron varias reglas instalándose sin ser invitados a semanas de la moda, revolucionando las calles. En ese grupo, aunque no directamente como parte de los seis, Martin Margiela también obtuvo reconocimiento, en un momento en que se había cambiado a vivir a París y había comenzado a trabajar para Gaultier. Y en 1988, cambiaría la moda con su colección S/S 1989, donde debutó el hoy famoso Tabi shoe.
