La música house estaba de moda, la ropa colorida también y el despertar sexual era un tema ampliamente reflejado. Los años ’90 a través del cine pueden mostrarnos facetas divertidas, románticas y muy livianas, pero dos cintas son las que grafican un estilo completamente estético y aun así más profundo dentro de sus propuestas: Party Girl (1996) y Nowhere (1997).
Nueva York parece ser la ciudad más atractiva, extraña, multicultural y divertida del mundo, todo a través de los pasajes que nos muestra Mary. Parker Posey se convirtió en toda una it girl cuando se estrenó esta película, que la tiene como una chica de mucho estilo, que organiza fiestas clandestinas para pagar el arriendo de su departamento y se rodea de talentos bohemios como su amigo DJ, su amigo con ventaja el portero de la mejor disco de Nueva York (un jovencísimo Liev Schriber) pero además, la voz de la razón en su vida, su madrina que trabaja en la biblioteca. Mary debe decidir si sigue con su errante estilo de vida lleno de música, elegancia, fiestas y personajes nocturnos o si consigue convertirse en una bibliotecaria respetada siguiendo una carrera al fin a sus 24 años. En medio de esta historia vemos looks tan distintos como incluso actuales, diversidad sexual, música bailable de fondo y hasta momentos como las vitrinas de Keith Haring o la modelo de los ’70 Donna Mitchell, en el rol de la dueña del club neoyorquino más popular. Además, Mary tenía una gran colección de prendas vintage y de diseñadores como Gaultier, Chanel y más.
Por otra parte, Gregg Araki dejó en Nowhere una postal sobre Los Ángeles como una ciudad peligrosa y llena de historias que también involucran la ciencia ficción, casi como rindiéndole homenaje a su origen hollywoodense. Los personajes son todos adolescentes que parecen mucho más adultos, desinhibidos y también amargos, como es el caso del protagonista Dark (James Duval), a quien no le molestaría ser el nuevo cineasta de moda. Actores como Rachel True, Kathleen Robertson, Christina Applegate, Mena Suvari, Ryan Philippe, Heather Graham, Traci Lords, Rose McGowan, Shannen Doherty, Chiara Mastroianni, Beverly D’Angelo y otros se intercalan en pequeños espacios de tiempo que van desarrollando historias cruzadas, como la de una adolescente que conoce a un famoso actor de TV que la viola, una pareja de lesbianas libre donde también una de ellas se relaciona con el protagonista, mientras Dark mantiene fantasías sexuales con ambos sexos. Drogas, moda, una estética que plantea pequeños mundos donde hasta las paredes forman una extensión de la personalidad de cada uno, es lo que Araki monta en esta película que forma parte de su trilogía del Apocalipsis Adolescente. Sin duda, ambas películas son muy distintas pero nos ayudan a entender un poco más cómo era ser joven en los ’90.
Fotos: Zimbio, Cinema.