Debutó en una película en 2014, pero fue 2019 su año definitivo de fama. Allí la vimos en dos de los grandes éxitos de ese año: Midsommar, la continuación de ese hit de horror llamado Hereditary y una nueva versión de Little Women, dirigida por Greta Gerwig. Florence Pugh es sin lugar a dudas un nuevo talento británico que ya se estableció entre el cine y la moda, ya que además Anna Wintour la eligió como protagonista de la portada de febrero de Vogue.
Pugh tiene 24 años, nació en Oxford y proviene de una familia de actores. Sus roles han ido desde lo clásico hasta los thrillers de acción, como Lady Macbeth y Little Drummer Girl, un drama de espías muy popular. En 2018 fue nominada a un BAFTA por Mejor Actriz en Ascenso y definitivamente todos comenzaron a fijarse en su talento y estilo; así llegó a convertirse en Amy March, la chica que crece y se roba a Laurie en Mujercitas, cinta que comparte junto a Saorise Ronan y Timotheé Chalamet, entre otros.
Pero en este mes, Pugh ya se transformó en it girl gracias a una revista. Vogue la puso en su portada de febrero con una editorial llena de diseñadores, un nuevo reto en su vida. Si hablamos de estilo, la actriz ha coqueteado con lo clásico, lo sartorial y la sensualidad de los vestidos ajustados y en 2020, la veremos junto a Scarlett Johansson en Black Widow.
Fotos; zimbio.