Antes que Jeremy Scott tomara París por asalto a temprana edad y después que Mainbocher se instalara como el primer norteamericano en conseguir éxito en la capital francesa, estaba Patrick Kelly. El diseñador norteamericano llegó con fuerza y también alegría a instalarse en la semana de la moda más reconocida del mundo, momento que le otorgó mucho éxito y popularidad, consiguiendo el hito de ser el primer norteamericano y afroamericano en ser invitado por la estricta Chambre Syndicale de Haute Couture.
Nacido en 1954, Kelly se embarcó en la misión de conseguir un lugar en la industria primero destacando como estudiante de Parsons en Nueva York. Ya como parte de la nueva generación de creativos, Oliviero Toscani capturó sus colecciones y retratos donde plasmó la misma energía y colorido que mostraban sus pasarelas, por donde caminaron desde Iman, pasando por Naomi Campbell hasta las mismísimas Grace Jones y Pat Cleveland rindiéndole homenaje a Josephine Baker. Eso era a fines de los ’80, época en la que también comenzaba a ser reconocido por sus vestidos ajustados y divertidos, sus botones y corazones bordados en sus prendas así como su entusiasmo por incluir modelos de todos los estilos y colores en sus pasarelas.
La importancia del trabajo de Kelly ha estado presente en varias muestras, incluyendo una organizada hace tres años en Philadelphia Museum. El estudiante de Arte e Historia Afroamericana comenzó arreglando vitrinas en la boutique Rive Gauche de YSL, para luego trasladarse definitivamente a París hacia principios de los ’80 tratando de conquistar su sueño. En 1986 comenzó a diseñar prendas sport para Benetton y ya cuando instaló su propia marca, hasta divas clásicas como Bette Davis llevaron sus prendas y coronas. Kelly falleció en 1990 a los 35 años, luego de un diagnóstico de tumor cerebral que llegó justo en su mejor momento. Para varias modelos de esa era, así como editores y curadores de museos, la corta pero significativa carrera del diseñador será siempre recordada, así como su gorro con la palabra París bordada en él.
Fotos: Redlist, History, Zimbio.