Cuando comenzó a aparecer en películas hacia fines de los años ’80 -por lo menos en Hollywood-, Nicole Kidman captó de inmediato la atención con su estilo pero igualmente con su talento. Poco a poco fue demostrando con sus roles que no era solo una chica muy alta tratando de consagrarse en Estados Unidos, o tampoco solo la esposa de Tom Cruise. Y con eso vinieron una serie de cambios estéticos que aun recordamos; su cabellera llena de rizos, su pelo rubio más corto o el tono colorín que mantuvo en “Batman Forever”. Aquí les dejamos algunas imágenes para ver cómo Nicole Kidman pasó de ser una australiana muy ochentera a un icono de estilo y musa de diseñadores como John Galliano.
Fotos: Zimbio, imdb.