Juan Luis Salinas es la pluma inconfundible de la revista Ya de El Mercurio, uno de los pocos periodistas chilenos que se dedican a la moda de manera seria y que analiza el tema más allá de la frivolidad. Parecía natural que luego de 17 años de dedicarse a hacer crónica sobre la materia, lanzara un libro con la historia de la moda y la mujer en Chile, después de todo es una de las personas que más se maneja en el tema a nivel local. “Linda, regia, estupenda. Historia de la moda y la mujer en Chile” lleva por título su primer libro, que es un recorrido por los hitos y procesos más importantes que han moldeado la moda en nuestro país y que se lanza oficialmente hoy.
Juan Luis Salinas retratado por Djalma Orellana
El libro se divide en 6 capítulos que analizan los cambios y transiciones ocurridos desde la década del cincuenta, hasta la del noventa, cada una por separado, más un epílogo que analiza el fenómeno de las tribus urbanas. Cada capítulo comienza con una gráfica que incluye una imagen de la modelo Renata Ruiz fotografiada por Nacho Rojas y caracterizada con el estilo propio de la década y una didáctica línea de tiempo que anuncia los grandes hitos de ese período. A su vez, cada década analizada se cierra con imágenes de desfiles, personajes y eventos que marcaron el respectivo decenio.
-¿Por qué el libro empieza en los cincuenta, por qué no ir más atrás?
-Empieza en los ’50 por una razón lógica y trágica, a la vez. Conseguir información de los ’50 ya era difícil, con la estructura que trabajo yo. Fuentes vivas de los años cincuenta me costó mucho conseguir y las que encontré tuvieron que hacer un ejercicio de memoria considerable. Me presentaba a las entrevistas con recortes y con fechas anotadas para que ellas se recordaran de los hechos. Me hubiese encantado partir el libro desde principios de siglo, pero eso hubiese significado un trabajo de investigación de por lo menos tres años más. Yo no soy historiador y uno tiene que ser consiente de sus limitaciones. Además, siento que desde los cincuenta hacia adelante es cuando se produjeron los cambios más importantes para la mujer en Chile: la participación por primera vez en las elecciones, empiezan a trabajar, llegan los diseños de Christian Dior… Hubo demasiados hechos que me dieron la señal para partir desde ahí.
-¿Por qué el relato se agota en los noventa, por qué no hablar de la década del dos mil?
-Porque necesito alejarme del objeto de estudio para analizarlo. El dos mil es demasiado cercano. Son hechos que ocurrieron hace recién una década. En el dos mil me hubiese dedicado a consignar hechos de cosas que aún están en proceso. O sea, si hablamos de la década del 2000, podría haber hablado del diseño independiente, pero el diseño independiente aún no ha madurado en Chile.
-Sin embargo, el epílogo hace referencia a las tribus urbanas, fenómeno que tuvo su apogeo en esa década…
-Las tribus urbanas empezaron a gestarse a fines de los noventa y las incluí porque cerraban el arco narrativo de una manera interesante. Parto con los años ’50, donde sólo unas pocas mujeres podían ver las colecciones de Dior que llegaban a Los Gobelinos, para finalizar con una popularización de la moda, que tenía como protagonista a gente mucho más joven y de sectores populares que no aspiraban a la sofisticación.
Le tomó tres años y medio a Juan Luis Salinas completar el libro, sin contar el año en que estuvo dándole vueltas a la idea de hacerlo. “Las dos primeras décadas que relata el libro fueron terribles en términos de redacción, porque tenía que cotejar muchos datos y no quería equivocarme. A medida que fui avanzando en las décadas, ya tenía una memoria y los datos en mi cabeza de lo que había pasado”. La investigación se basó principalmente en el estudio de diarios y revistas de la época, junto con entrevistas personales. “Revisé mucho el archivo de El Mercurio, todas las revistas Zig-Zag, todas las revistas Ercilla. Me pasaba fines de semanas completos en el diario revisando publicaciones. Amigos de provincia me compraban revistas Eva en ferias y me las mandaban por encomienda, las que me servían para contextualizar y tener una idea de lo que ocurría en esa época”.
A pesar de que el libro contiene varios datos, fechas y personajes de la escena de la moda chilena, el autor optó por poner el acento en los procesos y transiciones, más que en las cuestiones coyunturales. “No quería hacer un libro que fuera una repetición de hechos y datos sobre la moda chilena. Para mí la moda es la excusa para hablar de la mujer. No se puede hablar de una textura y de un color, sin saber lo que está ocurriendo en el momento”.
Juan Luis ocupa un tono analítico, pero ágil, a veces irónico, a veces derechamente jocoso. El texto tiene la gracia de pasear al lector por distintos tipos tonos narrativos, en un relato que deja con ganas de saber cómo se seguirá escribiendo la historia de la moda en Chile.
“Linda, regia, estupenda” lo encuentras en las principales librerías del país a partir del jueves 24 de abril.