Giorgio Armani irrumpió en los ’80 con un vestir pulcro, distinguido y listo para una nueva era de poder. A pesar del simbolismo de sus trajes en plena era yuppie, contó con el apoyo de un fotógrafo que tomó el camino menos obvio de todos, y llenó de tranquilidad el estilo a través de su trabajo: Aldo Fallai.
El mismo que retrató a Gia Craangi llevando la moda femenina de Armani, fue el que decidió poner en sepia a varios de los modelos masculinos de la marca que encarnaron la tradición del power suit. En este aspecto, sus fotos fueron mucho más un revival de los años dorados del look gentleman que un arroje al rol masculino ochentero donde la ambición regía el vestir. Para Fallai, trabajar con otros como Hugo Boss también significó poner notas de color a los trajes más serios.
Camaradería masculina, camisas cerradas y sombreros acompañando el estilo, gafas redondas que fueron el boom de los ’80; todo lo tomó Fallai para componer su oda a varias de las marcas más tradicionales en el vestir masculino. Para muchos estos retratos parecen el sentir añejo de un época, mientras que otros podrían volver al minimalismo gracias a ellos. Para todos, forman parte de los archivos que componen la moda masculina, que también ha pasado por etapas y cambios notorios en la historia.