Colaboración por Andre Álvarez
Desde hace un tiempo llevamos viéndolo en las semanas de la moda, tanto en los desfiles como en el streetstyle: chicas con el pelo blanco que aparecen cada vez con más frecuencia frente al lente de los fotógrafos que han ayudado a masificar esta tendencia. Quizás se lo debemos en parte a Daenerys Targaryen, de Game of Thrones, a Lady Gaga, a Nicole Rochie o quizás a ninguna de ellas, pero cada vez es más común ver chicas —jóvenes y adultas— luciendo orgullosas su pelo blanco.
Por primera vez en mucho tiempo la moda les hace un favor a las mujeres mayores y pone como objeto de deseo lucir la madurez de las canas y el pelo blanco. Lo agradecemos y lo deseamos. Pero esto no es completamente nuevo, ya que en la Edad Media era símbolo de virtud y en el siglo XVIII fue sinónimo de refinamiento. No olvidemos que en las pelucas, tan de moda entonces, se empolvaban de almidón de arroz y papas.
Hoy en día no necesitamos recurrir al arroz ni al talco para blanquear nuestra cabellera, aunque el método de decoloración puede ser bastante invasivo, es importante estudiarlo bien para tomar la decisión correcta y recurrir a un especialista en el tema para que realice el proceso. En cuanto a detalles se lleva en todo tipo de cabello o corte, y es tan versátil que lo podemos lucir blanco nieve, platinado cuál Marilyn Monroe, grisáceo y hasta con toques de otros tonos como el lila.
Este pelo transmite madurez, tranquilidad, sabiduría y delicadeza, y se puede lucir con cejas oscuras y naturales, o como deseemos. Hoy en día tenemos pocos límites para crear nuestro look perfecto.
