El debate entre diseñadores y el mundo político se ha tornado importante cuando hablamos de la nueva era que vive Estados Unidos con Trump. Quién vestirá a Melania o quién no es una de las disyuntivas principales de los últimos meses, acrecentando el simbolismo e importancia que acarrea el sentido estético de una figura tan potente como lo es la Primera Dama. Pero en el pasado, existen casos más populares y también hitos que han marcado el mundo, todo a través de la manera en que las esposas de Presidentes y Mandatarios se han planteado presentarse ante el mundo y conseguir la mezcla perfecta entre elegancia y cercanía.
Jacqueline Kennedy
Es sin lugar a dudas la figura indiscutible del estilo de una Primera Dama, referente número uno de cualquier mujer que se presente oficialmente bajo ese mismo puesto. Durante los años ’60, Jackie O como fue reconocida después, combinaría Halston en sombreros y Oleg Cassini en vestidos, así como trajes Chanel y otros nombres importantes. Pese al trágico desenlace de su rol, con el tiempo seguiría conquistando fans a través de su look y se convertiría en icono por sí misma.
Eva Perón
La argentina personificada en musicales y películas con Madonna, es también un símbolo de cómo el vestuario es una herramienta importante a la hora de asumir un rol público y político. Legendaria es su cercanía con el icónico Christian Dior, quien confeccionó sus vestidos en base a un maniquí con sus medidas que el francés mantenía en su estudio en París, dejando en claro que su imagen estaba en manos del mejor diseñador del mundo.
Michelle Obama
Es la figura representativa del estilo en la política de los últimos años, una de las raras ocasiones en las que llevar prendas de diseñadores no significó alejarse del público. Michelle Obama llevó la moda como parte de su estrategia de empoderamiento femenino pero también, como parte de la incorporación multicultural de quienes viven en Estados Unidos, mostrando creaciones de nombres latinos e inmigrantes de distintos lugares con gracia y elegancia.
Nancy Reagan
La esposa de Ronald Reagan, uno de los periodos más difíciles de la política norteamericana en plena década de los ’80, supo llevar con gracia los trajes de algunos de los más importantes nombres le confeccionaron en su rol como Primera Dama: Oscar de la Renta, Norman Norell pero especialmente James Galanos, quien la vestía de rojo, un color potente que se transformaría en uno de sus favoritos.
Carla Bruni-Sarkozy
Como modelo de grandes casas como Chanel, Ferragamo y Versace, Carla Bruni tenía fama y fortuna por sí misma pero en su rol como Primera Dama de Francia a fines de la década del 2000, se convirtió en icono. La prensa la seguía llevando Dior a cargo de John Galliano, recreando con sensualidad el estilo Jackie Kennedy y comparándola con otras figuras femeninas mundiales. Así, el periodo de Nicolas Sarkozy se convirtió en uno de los más recordados también por el estilo impecable de su esposa.
Samantha Cameron
La esposa de David Cameron se convirtió en un símbolo de su país gracias al estilo que irradiaba en sus apariciones oficiales, siendo destacada ampliamente en los medios nacionales por sus elecciones de colores y vestidos. Tiempo después, Samantha lanzaría su propia línea de ropa el 2016 llamada Cefinn, la cual mostró en las páginas de la revista Vogue en su edición de enero.
Para ustedes, ¿cuáles son sus Primeras Damas favoritas por su estilo?
Fotos: Yahoo, People, Telegraph.