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En Diciembre del año 2000, Tina Walsen se toparía con un elemento que le daría sentido a su vida. Luego de practicar modelando para su madre y posar en cámaras familiares, la chica de Curicó revisó la edición de ese mes de la revista Vogue UK. “Encontré mi verdadera pasión”, dice esta chica, que a los 17 años decidió comenzar en el modelaje posando para nuevos fotógrafos.
A los 18, la agencia Elite decidió contactarla luego de revisar su book en Facebook, y en poco tiempo ha logrado aparecer como rostro de Place Vendôme e, incluso, viajar a China y Singapur en su edición de Agosto. Walsen admira a modelos como Freja Beha Erichsen y Liu Wen, aunque actualmente está obsesionada con la brasilera Aline Weber. “Las modelos chilenas no se atreven a tomar la actividad como un trabajo de tiempo completo, ya sea por la presión de la familia o por la desinformación o desprestigio de la profesión”, asegura.
Sus planes más cercanos involucran retomar sus estudios y aprovechar al máximo lo que le depare su carrera. “Espero dar un 100% en cada trabajo durante el tiempo que me sea posible; después me gustaría trabajar como productora de modas”, concluye.
