El uso de Photoshop en la moda ha causado polémica desde siempre. Ya sea borrando “imperfecciones” del cuerpo, o reconstruyendo por completo a quien posa frente a la cámara, la herramienta de edición de fotografía más famosa del mundo ha sido siempre un arma de doble filo para revistas y sitios webs. La última involucrada en la polémica ha sido Target, la cadena estadounidense que publicó fotografías de su campaña de bikinis con un photoshop muy mal logrado, que solo deja al descubierto la manipulación fotográfica en busca de cuerpos más delgados.
La fotografía no tomó mucho tiempo en transformarse en viral de Internet y cientos de personas se encargaron de hacerle saber al mundo lo que opinaban al respecto. En la fotografía a la modelo se le retocó la entrepierna para lograr el Thigh Gap y se le adelgazó la cadera y el contorno cercano a las axilas. Pero quien hiciera el trabajo olvidó borrar la evidencia: la modelo posee el hueco entre las piernas, pero olvidaron borrar la tela sobrante, quedando un desastre en la imagen al igual que trozos de piel sobresalientes sobre el calzón y bajo la axila, en trozos de brazos y manos recortados.
Target ha pedido las disculpas respectivas en un comunicado diciendo que “este fue un desafortunado error de nuestra parte y nos disculpamos. Hemos sacado la imagen de nuestro sitio”. Por más que lo hayan hecho, cientos de personas han levantado el debate sobre el Photoshop en las campañas publicitarias, que golpea fuertemente en un momento en el que parecieran estar cambiando los cánones de belleza y creciendo la aceptación por cuerpos más reales. ¿Será suficiente la disculpa pública de la marca?
