Colaboración de Natalia Briceño
Con el boom del retail y las grandes cadenas de moda que aterrizan en el país, las pautas chilenas de vestuario han sido guiadas por las tendencias europeas que llegan a través de la publicidad, los medios de comunicación y las redes sociales. Sin embargo, desde hace unos años en forma paralela se ha desarrollado un mundo alternativo en el que diseñadores nacionales, artistas y creadores independientes se han dado la libertad para crear sus propias pautas –distintas a las procíclicas del fast-fashion cambiante–, e incorporar altos estándares de calidad que dan origen al término acuñado por Hand Made, por su característica de fabricación “ hecho a mano”, el cual se asocia al lujo y la escasez; es decir, la exclusividad.
Estas prendas y artículos de moda, que van desde ropa y accesorios, hasta joyería y artículos para el hogar, son fabricados a baja escala, y por lo general son intensivas en cuanto a mano de obra debido a que su diseño y elaboración provienen directamente del espíritu y visión de su creador, siendo muchas veces estos mismos los que participan en el proceso productivo completo; lo cual genera un gran valor agregado en cada artículo y a su vez un alto precio en comparación con la extensa oferta proveniente del retail tradicional.
Tal es el caso de la tienda “D2” ubicada en calle Merced, en pleno Barrio Lastarria, que desde hace varios años sorprende y encanta a sus clientes con accesorios que mezclan tela, pedrería, plumas y diferentes materiales. Otro ejemplo, es la Tienda “Ají” que comercializa joyas fabricadas con distintas técnicas y materiales como crin, cobre, cerámica, lana y piedras chilenas. Y si nos referimos a vestuario de diseño de autor, también podemos mencionar las prendas de lana de oveja chilena 0% merma de Pitti Palacios y los accesorios de Marta Morrison, que buscan rescatar raíces nacionales con diseños vanguardistas, inspirados, por ejemplo, en la chupalla del huaso chileno, de donde nace la técnica tradicional del trenzado de paja.
Así, se ha ido creando en el tiempo un nicho de mercado donde el consumidor final busca identificarse con el diseño de autor y a su vez ser interpretado por el artista de forma tal que exista armonía entre las macro tendencias de la moda actual y la exclusividad, existiendo una relación estrecha en cuanto a visión de mundo y moda, estilo de vida, concepto de estética, etc. Este nuevo consumidor valora la fabricación a baja escala, valora la participación de las personas en la fabricación y está dispuesto a pagar altos precios por productos de estas características.
Este fenómeno económico, social y creativo de la moda ha experimentado un aumento sostenido en los últimos años, por lo que es posible observar cada vez más tiendas dedicadas a este nuevo concepto de lujo. Cabe destacar que muchos de estos diseñadores comenzaron su negocio utilizando solo redes sociales y ferias de diseño. Sin embargo, es posible visualizar el éxito de muchos de ellos debido a la creciente apertura de tiendas ubicadas en polos de desarrollo dedicadas al diseño y el arte, como son los barrios Lastarria, Bellas Artes y Barrio Italia. Centros comerciales como Drugstore, así como espacios otorgados por algunos malls, también han incorporad a este consumidor en su objetivo de ventas, dándole espacio al diseño independiente con colecciones que se mantienen entre medio del concepto de retail y exclusividad hecha a mano.
A pesar de todo, no es claro el futuro de este tipo de tiendas debido a que al mismo tiempo que existen casos de éxito, también los hay de fracasos, por lo cual no se sabe si esto se debe a una falla en la propuesta artística o a un error en la política comercial y de precio, como fue el caso de la tienda Hall Central, que cerró sus puertas después de muchos años en el mercado.
Lo que sí es evidente, es que existe el talento y la tenacidad suficiente para ver muchos emprendimientos en el futuro y un público fluctuante que está en una búsqueda constante de identificación y de propuestas artísticas nuevas.
Imágenes de unlugardetelar.blogspot.com, pittipalacios.cl, facebook.com/martamorrisonjoyas y lsz.cl
