Algunas campañas de moda han sido controversiales y antes de las redes sociales, no existían para darle una voz a la opinión pública. Por eso, quisimos reunir fotos y editoriales que tocaban temas sumamente delicados y parecían rozar los límites.
Cuando Tom Ford llegó a Gucci a mediados de los noventa la marca estaba pasando por un mal momento. Cuando la dejó en 2004, la firma era mucho más potente: Ford siempre tuvo claro que el sexo vende. Al principio, sus campañas contenían poses sugerentes y camisas con transparencias pero en 2003, llegó el ‘cunnilingus corporativo’ protagonizado por Carmen Kass y fotografiado por Mario Testino.
Los eslogan son muy importantes, a principios del siglo XXI, una marca de básicos triunfó explotando la sexualización de sus modelos. No hace mucho, las vallas publicitarias de American Apparel aparecían jóvenes en ligeras ropas en posturas sugerentes y consignas bastante explícitas. Después llegó el escándalo: el dueño de la firma, Dov Charney, acumulaba denuncias por acoso. El público dejó de sentirse seducido por la publicidad de la empresa y por el historial de su CEO y American Apparel se declaró en bancarrota en 2017.
“Victim of beauty”, en 2011 la revista búlgara ’12’ publicó este editorial de “belleza” sumamente controversial, donde mostraba a una modelo golpeada y maquillada. El dúo creativo formado por el fotógrafo Steven Meisel y la directora Franca Sozzani convirtió la edición italiana de Vogue en una fuente de alabanzas y polémicas. En sus páginas, las modelos aparecían yendo a la fuerza a rehabilitación, cubiertas por petróleo en medio del mar, retocándose en el quirófano o siendo reducidas por las autoridades. Este editorial, titulado ‘Estado de emergencia’, pretendía denunciar el control excesivo que se desató tras el 11-S.
El abuso del bodypainting también ha dado de qué hablar, algunas marcas prefieren pintar a sus modelos. Cuando Carine Roitfeld dirigía Vogue París decidió hacer un editorial junto a Steven Klein y la top danesa Lara Stone pintada completamente.
Entre todas las top models de los sesenta, la alemana Veruschka encontró su nicho de mercado posando entre animales salvajes, cubierta de pieles exóticas o incluso emulando a una cazadora.
Fotos: El País