No hay revista, ídolo musical, película, modelo, diseñador o artista que no esté influenciado por David Bowie. Desde las canciones hasta su look, cada aspecto de la carrera de este inglés ha marcado cada era, y por ello es siempre bienvenido recordar parte de su historia, más ahora que regresa con un nuevo disco.
Mr. Shampoo, como lo llamaban en su adolescencia, se caracterizaba a fines de los ’60 por un estilo folk, un cabello rizado y trajes de camisa estampada y pantalón; pero pronto la influencia de su esposa Angie lo llevó por el camino del glam. En los ’70, emergió con el personaje que lo hizo conocido, Ziggy Stardust, donde con la ayuda del diseñador japonés Kansai Yamamoto y el maquillador Pierre La Roche, trazó una nueva estética. Aladdin Sane y las míticas fotografías de Brian Duffy, Halloween Jack, Thin White Duke y todo el esplendor pop de los ’80 también surgieron con el tiempo, agrupando la estética que aprendió de su época con el mimo Lindsay Kemp y su amor por lo oriental.
El cine también dio paso a nuevas facetas de estilo para Bowie. “The man who fell to earth” (1976) marcó su inicio como actor, con el look que después mostraría en el disco “Low”: cabello rojizo corto y trajes azulados. Este mismo look lo adoptaron desde Kate Moss hasta Tilda Swinton en los cientos de homenajes de editoriales de revistas que ha recibido, sin contar los mismos a través de sus personajes más teatrales. “Just a Gigolo”, “The Hunger”, “Laberinto”, “Absolute Beginners” y otras apariciones en películas siguen alimentando el mito, el mismo que hoy vive a través de un nuevo disco anunciado para marzo de este año, y un nuevo video lanzado justo el día de su cumpleaños.
