Placard Cerro Alegre: Un espacio vintage en Valparaíso

Marisol Martínez, Diego Muñoz y Loreto Araya decidieron atreverse con su propio proyecto el año 2010, instalándose en la calle Templeman de Cerro Concepción, Valparaíso. “En Placard creemos que existen prendas que merecen una segunda oportunidad”, señala la frase que revela el espíritu de esta tienda, cuyo nombre es Placard Cerro Alegre (https://www.facebook.com/placardcerroalegre). De martes a domingo, hasta las 19:30 hrs., las banderas de colores de Templeman 769, reciben a sus fieles clientes –entre ellos, Carolina Varleta e Ignacio Franzani-, quienes siempre encuentran lo mejor en selección de prendas de segunda mano y vintage, así como marcas y diseñadores independientes chilenos. Contra la Maquina, Casa Naif, Macarena Toro, Clau Cirano y varios otros nombres nacionales se mezclan con las prendas rescatadas de Placard Cerro Alegre, las mismas que se mantienen como la base de esta proyecto porteño, del cual hablamos con una de sus creadoras, Loreto Araya.

¿Cómo nace Placard Cerro Alegre?

La idea empezó a rondar cuando limpiando los closets propios y de varias amigas, nos dimos cuenta que había ropa que no usábamos pero que estaba en buen estado. Se vendían en el patio de luz de la casa y después nació el plan de tener una tienda para poder venderla de mejor forma. Literalmente convertimos una bodega de tierra en una tienda con nuestras propias manos, tuvimos altos y bajos; fue un gran esfuerzo que finalmente dio su fruto, la creación de Placard. Desde ese momento han existido varios cambios; hemos refinado la selección de las prendas y conocido diseñadores independientes que han aportado al espíritu de la tienda, además de crear una imagen apoyada por fotos y videos. Así hemos ido avanzando hasta el día de hoy, donde ya organizamos ferias como Templeman Bazar, tenemos un espacio y vamos a cumplir dos años.

¿Qué resultados han obtenido a través de Templeman Bazar?

Como Placard organizamos Templeman Bazar dentro de la galería donde nos encontramos, usamos el espacio que nos da el patio de luz e invitamos a expositores que no tienen vitrina en tiendas. Aparte de convertirse en un medio de difusión para distintos diseñadores, también es un atractivo punto turístico para quienes tienen la posibilidad de comprar algo barato y novedoso. Nos ha servido como tienda para atraer publico a nuestra galería y generar un mayor movimiento dentro del cerro. También nos ha servido para encontrar nuevos proveedores y darnos cuenta de cuáles son las preferencias del cliente; nos preocupamos de que en cada feria se muestren productos originales y de calidad. En la última fecha de Templeman Bazar hicimos un especial Vintage, donde hubo una selección de prendas únicas y donde el publico respondió de gran manera a la invitación. Mientras más creativo y profesional sea el producto, mejor es la respuesta de la gente a comprar y a volver a participar de estas instancias.

¿Cuál crees que ha sido la evolución de la ropa usada en el mundo de la moda?

Hoy existe una mayor conciencia; para vestirse bien no es necesario recurrir a comprar cosas costosas y de grandes marcas. La ropa usada abre un espacio para que la gente encuentre en ella el estilo que anda buscando y a veces esos estilos nutren nuevamente a las marcas de ropa, que han basado colecciones en lo que se ve en las calles. Así se ha popularizado el estilo vintage, beneficiando finalmente a las tiendas como la nuestra. Vestirse bien es cosa de gusto, puedes abrir el closet de tu abuela y encontrar cosas interesantes ahí.

¿Quiénes componen en su mayoría a tu clientela?

La mayoría son turistas que recorren el cerro y que no se guían por los típicos atractivos turísticos de los mapas, andan a pie y son curiosos. Ellos valoran lo hecho a mano, los detalles y la arquitectura de la casa en la que nos encontramos. También tenemos una clientela habitual y fiel que se contactó con Placard a través de las redes sociales y el boca a boca. En su mayoría son gente joven en búsqueda de tendencias.

¿Cuáles han sido las marcas/estilos que más buscan quienes van a la tienda?

No existe una preferencia definida, hay gente que viene por lo vintage y se encuentra con diseño independiente, con marcas inspiradas en lo vintage como Casa Naif, La Casita de Memoria y Contra La Maquina que recicla el 100% de sus telas. También tenemos un espacio para ilustradores como Macarena Toro, Cristóbal Correa y Maurean Hozven, así como diseño sustentable de Diseño Mas Papel y Love Eco.

¿Por qué crees que hoy es tan popular la ropa vintage/usada?

Como decía antes, gracias a las grandes marcas, a los medios de comunicación, internet, bloggers, etc., todos hicieron más visible a la gente que se viste bien y siempre habrán otros que quieren saber de donde sacan las prendas. Es así como vuelven las modas.

¿Cuáles son los planes futuros o proyectos de Placard Cerro Alegre?

Gracias a nuestra constancia y trabajo, Placard se ha abierto un espacio. Ahora queremos consolidar la marca, logrando mayor difusión, expandirnos hacia otro punto en la región y poder llegar a ser una gran vitrina para el vintage y el diseño independiente, manteniendo nuestra estética y trabajo audiovisual.

¿Piensas que en Valparaíso existe alguna característica que diferencia a quienes habitan en otros lugares, a la hora de preferir ropa usada?

La gente de Valpo es bien vintage, no solo en el sentido estético, vive en una ciudad de contrastes, colores, adoquines y ascensores con olor a antiguo, a pasado, que a algunos no les gusta y a otros si, está en el ADN de la gente y de la cuidad. Valparaíso se ha nutrido de artistas, inmigrantes y una bohemia que le han dado una característica diferente. La gente para ir al plan a comprar a veces sin pensarlo crea su propio estilo; pintoresco, se viste con lo que tiene y si no lo tiene lo rebusca en tiendas de ropa usada, por necesidad, por tradición o por gusto.