Balenciaga entabló una demanda contra la marca de zapatos Steve Madden por haber copiado intencionalmente el diseño y los colores de su zapato Lego de la colección de otoño 2007. Los originales (en la imagen, a la derecha, se vendían en cerca de dos millones de pesos, y las copias, a la izquierda, a sólo $ 50 mil). Y esta no es la primera vez que la empresa hace esto.
En octubre, Alexander McQueen también demandó a Steve Madden por la copia de su “Faithful bootie“, inspirada en una chaqueta de motociclista (izquierda original, derecha imitación):
Forever 21 es otro falto de creatividad. Vestidos, zapatos y carteras de distintos diseñadores, forman parte de su largo historial de demandas (izq. F21, der. MJ Hudsen)
En este otro caso F21 (derecha) “se inspiró” en Chloé (izquierda)
Marc Jacobs izquierda, F21 derecha:
Topshop no se queda atrás y también ha tenido problemas con la justicia (izquierda Chloé, derecha Topshop):
Yves Saint Laurent a la izquierda, Topshop derecha:
Lo más probable es que las empresas continúen haciendo copias, porque el costo de una sanción traducida en multas, es inferior a las ganancias que obtienen por las ventas. Y además, porque alguna de nosotras (si no la mayoría) seguimos comprando a estos inteligentes y atractivos piratas institucionalizados.