Entrevista a Pamela Staplefield, diseñadora y orfebre detrás de Tesoro Mío

Entrevista a Pamela Staplefield, diseñadora y orfebre detrás de Tesoro Mío

Las joyas concebidas como un objeto único, significativo y duradero es parte de la visión que Pamela Staplefield busca reflejar en cada una de las piezas diseñadas y elaboradas bajo su marca Tesoro Mío. Diseñadora industrial de profesión, con un largo historial vinculado a las manualidades y una madre que alentó ese talento y amor por los accesorios desde sus primeros días, hoy Pamela se dedica por completo a su marca, la cual ya lleva 4 años en el mercado. Una historia de idas y vueltas, pero sobre todo de mucho trabajo y perseverancia que te invitamos a conocer.

Un truncado inicio como diseñadora en el mundo del retail y una fuerte decepción vinculada al campo laboral del diseño industrial, llevó a Pamela a viajar a Buenos Aires y estudiar por 7 meses cursos vinculados a la realización de accesorios. A su regreso exploró en el retail y posteriormente en la publicidad, áreas que finalmente abandonó por la muerte de su madre, para conectarse con una pasión que siempre estuvo latente: la joyería.

Al poco tiempo empezó a estudiar de manera intensiva orfebrería, para luego continuar de manera autodidacta con el emprendimiento que se llamaría Tesoro Mío.


-¿Por qué escogiste el nombre “Tesoro Mío” para tu marca?

-Porque mi mamá me decía así. Siempre vuelvo a leer los correos que me mandaba cuando viví en Buenos Aires, y por alguna razón siempre encuentro respuestas en esos e-mails. En esa época, mientras vivía en Argentina, abrí uno en donde me decía “tesoro mío”, luego abrí otro y decía “tesorito”; por lo que pensé sonaba bien ya que habla de algo que es tuyo y de una joya como tesoro. Siempre he creído en las señales y me siento muy conectada con “mi vieja” de alguna manera.

-¿Hace cuánto tiempo empezaste con tu marca?

-En abril del 2011, y ahora voy a cumplir cuatro años. La verdad es que no fue una decisión, fue algo que partió de una forma natural respondiendo a un proceso súper personal.

-La joyería tiene mucho de diseño, de investigación y de desarrollar una colección, pero también es un emprendimiento y significa posicionar una marca. ¿Cómo fue para ti este proceso y cómo combinaste ambas áreas?

-Siempre he creído que he sido más emprendedora que creativa. No me considero una persona sumamente talentosa, pero sí alguien que trabaja muy duro. He visto a gente súper talentosa, pero que no venden nada. Además, aprendí muchísimo de publicidad. Llegó un momento en que ya le había vendido a mis amigas y a las amigas de ellas; en ese punto me acordé de todos los planes que aplicábamos con los embajadores en la agencia y dije “yo necesito hacer lo mismo, soy la gerente general de mi marca, tengo que salir a buscar a una embajadora”. Así fue como me contacté con la Jani Dueñas y la Antonia Tejerina, las dos eran súper distintas entre ellas y cada una representaba a dos tipos de clientas mías. Las dos usaban mucho Instagram, entonces creé mi propio Instagram y ahí todo empezó a crecer. Ese fue el momento en que rompí la barrera y dejé de venderles sólo a conocidos, de hecho ahora no le vendo a casi nadie que conozca y todos llegan por las redes sociales.

La publicidad es una súper buena escuela para construir una marca y en mi caso invertí para que me hicieran una linda tarjeta, el logo, la página web, etcétera para hacer de Tesoro Mío un concepto de principio a fin.

-Y a nivel de producción, ¿todas las joyas pasan por ti o también tienes un equipo que te apoya?

-Tengo un equipo, pero no trabaja de manera exclusiva para mi. Trabajo los engastes con una persona y para hechuras muy complejas o finas también tengo a una persona que me ayuda.

-¿Cómo es tu proceso creativo al crear una colección?

-Varía un poco. Soy súper cuadrada, veo una forma en algo, puede ser en cualquier cosa y “me quedo pegada” con ella. De hecho, intento no ver muchos libros y en general evito ver muchas joyas. No soy de la rama del proceso más consciente, soy al revés. Soy fanática de la belleza por la belleza, y desde ahí parto, pero en algunos momentos particulares ha sido lo contrario, como con mi colección de anillos inspirados en Nueva York, uno de los últimos viajes que hice.

Por otra parte, cuando empiezo a trabajar una colección me preocupo de que haya por lo menos dos versiones, una más básica y otra más compleja. Siempre tienen que haber anillos, aros y un poco de colgantes, a veces hacer la pulsera y una vez a las quinientas un collar.

-¿Cómo ves que está actualmente el mercado de la joyería contemporánea?

-Hay mucho talento y súper harta gente haciendo nuevas cosas. Sin embargo, creo que los consumidores aún no están lo suficientemente educados o informados en relación a nuestro trabajo. Me da la sensación de que se piensa que le estás haciendo un favor a un diseñador al comprarle algo, pero no es un favor, es una transacción. En ese sentido siempre he considerado que en todas las ramas del diseño, en general, falta mucha valoración, y en la joyería en particular, más aún.

Imagen del desfile de Tesoro Mío en Santiago Fashion Week 2014 – Fotografía por René de la Cruz

-¿Quiénes y cómo son tus clientes?, ¿cómo los definirías?

-Me enfoco en personas que quieren comprarse una joya; yo no entiendo joya como joyería fina, y son personas que en el fondo están aburridas de comprarse un accesorio de lata que a los tres o cuatro días se destiñen, o peor, que todo el mundo tiene. Está ese nicho y es donde creo que muchos joyeros de mi generación estamos apuntando. Por otra parte, hice el trabajo de personificar a mi consumidor. Mi hermano es ingeniero comercial, así que me obligó a hacer todo este análisis. Además era un ejercicio que hacíamos en la agencia: crear a tu consumidor, saber dónde estaba, qué marcas compra, qué comida le gusta, qué música escucha, etc. Eso lo hice millones de veces y volví a aplicarlo a mi marca.

Sus proyecciones son seguir creciendo, realizando clases de orfebrería a nuevos alumnos, así como alcanzar nuevos mercados en territorio latinoamericano. Por otra parte, para este 2015 Pamela está desarrollando una colección de joyas junto a Fundación Julieta, organización que se dedica al rescate de perros y animales callejeros, en donde las ganancias serán 100% destinadas a la causa. Perfeccionamiento, estrategia y profesionalismo son tres cualidades que rescatamos al conocer la historia y trayectoria de Tesoro Mío, marca que hoy se consolida como una de las más destacadas dentro de la joyería contemporánea chilena.

Imágenes: Marida Fotografía / VisteLaCalle / Instagram Tesoro Mío / Fan Page Tesoro Mío 

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