Este tipo de perforación es considerada como una de las más antiguas, remontando su uso a la época prehistórica junto con algunas culturas guerreras que lo utilizaron como herramienta de intimidación. Los orígenes de su nombre están relacionados a la pared que divide la cavidad nasal en otras más pequeñas y hace algunos años atrás estuvo de moda junto a una enorme lista para perforaciones. Hoy vuelve como uno de los accesorios más populares del momento, dejando atrás el estigma underground y convirtiéndose en un objeto adorado por cantantes, actrices, it girls e incluso firmas como Givenchy.
El Septum se consideró durante mucho tiempo como un signo de identidad propia de tribus urbanas, desde que el estilo punk lo llevó a las calles en década de los 70, pero gracias a personajes relevantes tanto en el mundo del espectáculo como la música, ha pasado a ser uno de los accesorios más cotizados por el común de las personas que tienen de referentes a artistas que lo lucen con orgullo. Tal es el caso de Rihanna, FKA Twigs, Angelina Blink, Lady Gaga y Jessica Biel entre otros. Givenchy también forma parte de este universo de fanáticos del septum, de hecho Riccardo Tisci ya lo había utilizado en su colección de alta costura primavera/verano 2012, y tres años después lo volvió a hacer en su desfile otoño/invierno 2015 en París Fashion Week, acompañado por un baby hair y pedrería en los rostros de las modelos.
Si bien los orígenes de esta modificación corporal, que ha causado tanto odio como fanatismo a nivel mundial, están relacionados al dolor y a la aceptación del mismo, hoy existen versiones a presión en variados tamaños, colores y modelos por un precio que muchos no creerían ($0,5 USD) en distintas páginas webs que se dedican a importar productos, como Aliexpress y Ebay. Si son de los atrevidos que desean sumarse a esta tendencia “guerrera”, la fórmula está en escoger el tamaño y tono acorde al rostro de cada uno.
Imágenes vogue.es/estarguapa.com/fashiontag/blogspot
