Nació en cuna musical y se notó apenas tuvo edad para comenzar en el cine. Su madre, la legendaria cantante y actriz que interpretó a Dorothy en “El Mago de Oz”, Judy Garland y su padre, el director de cine italiano Vincente Minnelli, no solo le dejaron talento y aptitudes dignas de Hollywood, sino también tormentosas adicciones que en más de algún momento hicieron peligrar su salud. Pero como ella, no hay ninguna; Liza Minnelli aun continúa siendo un símbolo icónico de la cultura popular y en un día como hoy, en el que suma su cumpleaños número 69, recordamos su estilo e historia.
En 1972 encarnó a Sally Bowles en “Cabaret”, película con la cual saltó a la fama de manera internacional, demostrando que lo suyo no solo era el apellido famoso. Junto a Michael York y Marisa Berenson, mostraron la historia ambientada en Berlín de la época Nazi, centrada en la vida nocturna y las ansias por conseguir un lugar anhelado en la vida. Así, Liza se ganó el respeto de la industria recogiendo su primer Oscar como Mejor Actriz, además de quedar para siempre relacionada con el rol de Sally. Luego vendrían otras películas como “New York, New York” de Martin Scorsese –donde interpretó por primera vez el clásico musical posterior de Frank Sinatra–, además de “Arthur”, comedia junto a Dudley Moore.
Además de sus aplaudidos roles y apariciones en distintos programas televisivos y especiales musicales, Liza se hizo conocida por su estilo. De la mano del diseñador Halston, la actriz y cantante supo sacarle partido a su figura y como marca registrada llevó túnicas acompañadas de capas de gasa y bufandas en el mismo color, además de vestidos con paños sobre la cabeza que registraron desde Andy Warhol en sus famosas Polaroids hasta el paparazzi Ron Gallela, quien siempre la fotografió en la vida nocturna estilo Nueva York. En esa ciudad, acompañada de su amigo diseñador y otras seguidoras del mismo como Bianca Jagger o Elizabeth Taylor, Liza bailaba al ritmo disco de Studio 54, mientras los excesos no se hicieron esperar. Durante años su abuso del alcohol y las drogas dejaron huellas en su carrera, contribuyendo también a deteriorar su imagen; sin embargo, las reapariciones que ha hecho en películas o entrevistas, demuestran que hay Liza para rato, pero quizás no de manera tan reluciente como en la era del lujo y la bohemia elegante.
Fotos: Pixshark, V magazine, Isabel Rose, Pleasure Photo, The redlist, Emma Peel Pants.
