Cada vez más nos encontramos en una búsqueda insaciable por ser únicos y eso significa que el vestuario no queda fuera. Adiós al retail, bienvenida la personalización parece ser la nueva premisa de esta era de la moda en Chile, algo que está al costado de lo que ofrecen los diseñadores tradicionales: intervenir prendas y específicamente, chaquetas. Valentina von Riegen comenzó en esto hace casi dos meses, con una marca que llena de metalizados, tachas y más chaquetas de jeans y cuero.
“Mi nombre es Valentina von Riegen tengo 26 años y me crié en la ciudad de Santiago. Desde pequeña sentí una fascinación por la Música y el Arte. Estudié Diseño de Vestuario y Textiles en la Universidad del Pacífico y me especialicé en Alta Costura. Actualmente tengo mi marca de ropa lanzada hace dos meses y hago estilismo para videos y artistas musicales”, nos cuenta Vale.
-¿Cómo llegaste a idear LE BUT y cuál fue la base para componer chaquetas intervenidas?
Necesitaba un lienzo que fuera accesible y a mi alcance para plasmar mis referentes y que fuera de fácil circulación. Una chaqueta de mezclilla o de cuerina se puede aplicar a diferentes contextos urbanos, tanto formales como informales. En cambio, un vestido de gala solo se aplica a un contexto cerrado y menos masivo.
-¿Cuáles son tus inspiraciones a la hora de idear un diseño?
Me inspira todo lo relacionado con el streetwear, el arte urbano, la alta costura, todo lo relacionado con la calle; de cómo se visten las personas en su día a día hasta la arquitectura, los murales etc. Trato de plasmar mis pensamientos y lo que siento en una catarsis textil. Los
diseños fluyen dependiendo de lo que sienta en el momento -una especie de freestyle-, por ejemplo, si tengo un pensamiento negativo el resultado final termina siendo un mensaje de amor, entonces tiene un poder curativo para mí y eso se transmite a mis clientas y se transforma en algo positivo.
-Hoy existen varias marcas populares de chaquetas intervenidas, ¿cuál crees que es el sello que diferencia a LE BUT?
Lo que me diferencia del resto es que los mensajes de mis creaciones trascienden hacia mis clientas y cada vez que ellas usan las prendas puedan vivir con ese sentimiento en su vida cotidiana; puedo contribuir a su autoestima más allá de lo decorativo.
-Hablemos un poco acerca de técnicas, ¿qué materiales utilizas para intervenir las chaquetas y que tipo de aplicaciones incluyes?
Mi técnica principal es todo lo hecho a mano y mis herramientas son el hilo y aguja. Hasta ahora no ha sido necesario ir más allá pero me interesa mucho ir explorando nuevas técnicas de customización. En cuanto a la materialidad, utilizo desde los más convencionales como lentejuelas, mostacillas, piedras, cristales y tachas hasta lo más específico como pinturas, que van a depender de la superficie textil y del acabado que necesite y esté trabajando. Intento que todo sea de muy buena calidad para que tenga durabilidad en el tiempo.
.¿Cómo ha sido la recepción del público, y que es lo que más te piden en cuanto a diseños?
La recepción ha sido mucho mejor de lo que yo esperaba. La sociedad actual ha entendido que el lujo no está relacionado al acceso a marcas especificas si no a la exclusividad del trabajo a mano. Lo que más me piden son prendas de uso diario, que necesitan una renovación ya que han cumplido un ciclo de uso o se encuentran viciadas. Por ejemplo, chaquetas fuera de temporada que necesitan un sello especial que se adapte a cada cliente.
-¿Cómo planteas continuar el futuro de LE BUT en cuanto a colecciones o a presentaciones?
Espero en un futuro ampliar mis soportes, ir más allá del vestuario: integrar calzado, carteras y accesorios, seguir potenciando mi línea artística y por qué no, en mi línea más comercial alguna colaboración con alguna marca más consolidada. En cuanto a colecciones, mi sello puede ser aplicado de manera atemporal, no me rijo por lo que está establecido en el mercado de la moda si no a las exigencias de mi público.
Con respecto a las presentaciones, creo que mi trabajo se aprecia en instancias más íntimas como showrooms. No descarto más adelante llegar a la pasarela cuando mi marca tenga una identidad visual y abarque más aspectos del vestir.
