Por misi pAnk
Si eres un seguidor empedernido de la moda, lo peor en la vida que puede pasarte es estar out. Sí, es peor que encontrarte vestido igual con otra persona en la calle o en una fiesta, peor que verse gordo, peor que todo. Andar con la moda del año pasado (y que se note) es lejos la más grande de las pesadillas.
Si eres un fashionista sabrás que este negocio es así: fluctuante. Y que lo nuevo, es lo cool, aunque sea un redescubrimiento de algo. ¿Cómo darse cuenta?
Lo primero es conocer el ciclo de la moda. Primero están las tendencias emergentes. Se pueden distinguir en la pasarela, en la alfombra roja o en MTV. Son esas prendas que te dejan en shock por su belleza y novedad. Segundo viene la fase de emulación, cuando todos quieren tener algo que sea de esa tendencia. Aparecerá en revistas, en diarios, en la tele y en internet. Tercero y para terminar, la tendencia satura el mercado y está a precio de huevo desde Patronato hasta en los malls.
Muchos de nosotros nos compramos la ropa cuando la tendencia está en la fase dos (si es que tenemos el dinero para ir a una boutique de marca) o tres (si es que somos como todos y vamos al mall). A menos que seamos Paris Hilton y nos compremos algo recién salido de la pasarela y antes de que llegue a las tiendas.
Pero, comprarse ropa accesible en las grandes tiendas es un arma de doble filo: hace que el look sea para todos, por lo tanto, TODOS se pondrán lo mismo. Resultado: la tendencia morirá pronto.
Entonces, la pregunta del millón: ¿Cómo saber hasta cuándo dura una tendencia?
– La mayoría de las tendencias duran un año. Algunas, que son las más clásicas y menos rupturistas, duran más.
– Los más sesudos estudiosos de la moda dicen que los ciclos de moda duran unos 20 años. Por lo tanto, a eso se debe la moda de los 80 en la actualidad.
– Cuánto dure la tendencia, depende de cuándo compres tu ropa. Si inviertes más y te atreves a ser de lo primeros, te la podrás poner mucho tiempo. Sino será solo para la temporada.
– Ten en cuenta que hay algunas tendencias que es obvio que se acabarán: cómpratelas, pero no inviertas tanto. Por ejemplo, ¿alguien le ve futuro a los boyfriend jeans o a los enteritos?
La mejor arma para defenderse de los cambios de moda es tener un closet que tenga como base algunos clásicos: jeans rectos, poleras, un vestidito negro. Ponte cosas a la moda que se sumen a esos básicos y te reirás de l@s fashion victim.
Las fotos presentan algunas tendencias que probablemente quedarán out el próximo verano. Hagan sus apuestas.
