Hace mucho tiempo, el pasearse con algún atuendo atrevido o mostrar un escote sugerente en Cannes era sinónimo de fama y éxito. Mujeres tan inolvidables como Brigitte Bardot posando en bikini junto a Kirk Douglas antes de ser la sex symbol por excelencia, Simone Silva haciendo topless para ganar fama al lado de Robert Mitchum o Madonna con el famoso conjunto de Jean Paul Gaultier para el estreno de su documental A la cama con Madonna son algunos de los hitos pasados que corroboran la fama de Cannes.
Y algunas de las mujeres más elegantes y estilosas han pasado por esa famosa alfombra roja que lleva a subir los escalones de la entrada del teatro. Catherine Deneuve, Anna Karina, Anna Magnani, Sophia Loren, Cate Blanchett, Audrey Tautou….Tantos nombres y tantos años resumidos en 63 versiones, que vieron nacer y escandalizar a estrellas y fashion icons con sus historias de romances, estrenos y por supuesto, moda.
Aunque hoy en día aparecer en bikini ya no es impactante como solía serlo en los ’50, en el balneario francés el Festival se nutre de vestidos cada vez más elegantes, pomposos y los diseñadores utilizan la alfombra roja como vitrina de lanzamiento o consagración. Kate Moss utilizó Narciso Rodríguez el ’97 para acompañar a su novio Johnny Depp, multiplicando las ventas de los estilosos y sencillos little grey dresses del diseñador; Jennifer López aseguró su impacto cuando apareció de Thierry Mugler el ’98; este año, Salma Hayek lució el primer vestido de la nueva línea de couture de la marca Gucci, llamada Gucci Première en el estreno de “Robin Hood”. Y en otras ocasiones, aparecen los mismísimos Christian Loubotin, Zac Posen o John Galliano rondando la alfombra del brazo de la maniquí escogida para llevar sus diseños. Y con eso, el glamour está asegurado.