En la industria del cine, el vestuario es una parte importante para desarrollar los personajes y la trama; un vestido puede cambiar el rumbo de las cosas. Por eso varias actrices han lucido una prenda color rosa, ya sea de manera casual o formal. Desde Audrey Hepburn a Marilyn Monroe a través de Elizabeth Taylor, descubre los vestidos rosados más icónicos del cine.
Marilyn Monroe en un vestido tubo en la película Gentlemen Prefer Blondes de Howard Hawks. Audrey Hepburn con un vestido de Givenchy en Breakfast at Tiffany’s de Blake Edwards. Nastassja Kinski en un vestido suéter en París, Texas por Wim Wenders. Kirsten Dunst en Marie Antonieta de Sofia Coppola.
Emma Watson con un vestido con volantes en Harry Potter y el cáliz de fuego de Mike Newell. Grace Kelly en Para atrapar a un ladrón por Alfred Hitchcock. Virginie Ledoyen en un vestido a cuadros en 8 mujeres de François Ozon. Marilyn Monroe con un vestido abotonado en Niagara de Henry Hathaway.
Catherine Deneuve en mini vestido en Las jóvenes de Rochefort por Jacques Demy. Elizabeth Taylor en The V.I.P.s por Anthony Asquith. Molly Ringwald con un vestido de lunares en Pretty in Pink de Howard Deutch. Lily James en un vestido de princesa en Cenicienta por Kenneth Branagh. Natalie Portman en un traje rosado en Jackie por Pablo Larraín. Vera-Ellen en White Christmas por Michael Curtiz.
Emma Stone en un vestido de verano en La La Land por Damien Chazelle y, por último, Reese Witherspoon en un traje estilo Jackie Kennedy en Legally Blonde 2: Red, White & Blonde por Charles Herman-Wurmfeld.
Fotos: Vogue, Pinterest