Los años ’70 y ’80 fueron la época perfecta para el trabajo de la diseñadora Fong Leng, quien convirtió las prendas de ropa en verdaderas obras de arte llenas de fantasía y felicidad. Colores, texturas y materiales se unieron creando verdaderos uniformes de otras galaxias, que se tradujeron en vestidos y abrigos que aparecen ligados a una época que ya no volverá pero que de seguro, persiste en momentos donde la creatividad puede nutrirnos como hoy.