La industria del calzado es una verdadera locura; cada par de zapatos que se atraviesa minuto a minuto ante nuestros ojos, son una verdadera obra de arte. Mucho hay detrás esta gran industria con productos que nos obsesionan y en especial a las mujeres de todo el planeta, por que uno no es ninguno y dos tampoco, nada podemos hacer frente uno de los grandes fetiches del mundo entero. Pensar que hace unos treinta años atrás todos estaban obligados a que un par de zapato duraran un tiempo bastante largo, unos cuantos años, llevándolos cada cierto tiempo a reparar, pintar, cambiar plantillas, arreglar suelas, ya que acceder a un buen par de zapatos de cuero era un lujo que pocos podían darse y menos de tenerlos en cantidades industriales en casa como hoy en día.
El 2016 tuvimos un titular bastante impactante para la economía de nuestro país, donde Chile se coronó como el país más consumidor de zapatos de Latinoamérica. El 90% de los zapatos que se comercializan corresponden a productos importados entre marcas de retail y el explosivo crecimiento de la compra por Internet, mientras que solo el 10% restante representa la fabricación nacional. Pero a medida de que han pasado los años esto ha ido cambiando, ya que cada vez son más las marcas de calzado chileno que existen y nuevos diseñadores emergentes que se atreven a diseñar pares únicos que vale la pena aprender a darle valor a un par de zapatos hechos a mano.
Los principales países de origen de este calzado de alto consumo son China, Vietnam, Brasil e Indonesia, los cuales representan cerca del 95% del total de zapatos importados por nuestro país, claramente destacando la procedencia y manufactura China, con una participación de un 82,07%.
Pero según los cánones de respeto, materias prima y producción, existen organismos reguladores y empresas que están a favor de reducir el impacto como es Leather Working Group. El Grupo de Trabajo del Cuero está compuesto por representantes de diferentes áreas de la cadena de suministro de productos en torno a diferentes materias primas que incluyen marcas importantes, curtidores, expertos técnicos y otros representantes de la industria. Tienen una finalidad crucial, trabajar para mejorar la administración de recursos para aminorar el impacto ambiental de la misma forma en el área del calzado por ejemplo. Muestran a través de buscadores las empresas y los países donde estos miembros operan para ver con quién quieres trabajar, de la misma forma puedes escoger las marcas que tengas un mayor % de trazabilidad, es decir, transparencia en procesos de producción. Además, están valoradas por calificaciones como GOLD, BRONZE, SILVER.
Es importante aprender sobre firmas que están alineadas con estas maneras de trabajar; parte del grupo de marcas que son miembros del LWG, Acne, New Balance, Adidas, Nike, ASOS, Burberry, LVMH, Puma, Timberland, H&M, Mark&Spencer, Clarks, Dr. Martens, Geox, entre otros.
Preferir marcas que están bajo estos cánones para poder así contribuir a una compra consciente y más slow.
Timberland, una de las empresas más importantes en el mundo del consumo outdoor y de la manufactura con buenas prácticas, tiene un concepto bastante importante ante este tipo de temas: “EL CUERO ES NUESTRA HERENCIA O NUESTRO PATRIMONIO” y la sustentabilidad siempre ha sido un eje central para nuestra marca. Teniendo una gran responsabilidad y comprometiéndonos con la durabilidad y longevidad de nuestros producto”, señala Emily Alati, Director of Materials Development de Timberland.
Mucho ya se produce de manera inteligente con nuevas tecnologías que reducen la electricidad, el agua, el gas y los productos químicos, así como las emisiones de CO2 a la atmósfera. Al igual que la era del calzado vegano y sus impactos económicos. Mientras las marcas se comienzan a alinear a los nuevos cánones de productividad nosotros seguimos teniendo responsabilidad compartida y para hacer que un par de zapatos sean sustentables en el tiempo, nuestro cuidado es crucial y la longevidad que le podamos entregar es importantísimo; alargar la vida de este producto es responsabilidad de todos.