Cuando el código de vestimenta aparece en la invitación, todo el mundo espera que la inspiración máxima para aparecer en el evento, sea la que dictan los organizadores. Y cuando se trata de algo tan popular e influyente como la gala MET, todos los medios dan por entendido que veremos a las celebridades lucir sus mejores apuestas en un romance con sus atuendos escogidos. Sin embargo, esta gala del 2015 que inaugura la exhibición “China through the looking glass”, no tuvo mucha influencia asiática entre sus asistentes.
Partamos por el caso que la principal tendencia fue mostrar todo, o casi todo. En 1974, Cher escandalizaba y a la vez demostraba que no existía nadie como ella llevando los atuendos transparentes y llenos de cristales de Bob Mackie. Piel expuesta y muchos efectos que dejaban ver que sus curvas eran la tónica de una que otra alfombra roja. Pero más de 40 años después, Jennifer López de Versace, Kim Kardashian llevando el vestido debut de Peter Dundas en Roberto Cavalli y una casi desesperada por atención Beyoncé en Givenchy, no solo dan cuenta que lo que les importa a las estrellas es el qué dirán y no el aparecer como la mejor vestida de la noche, algo que para muchos es divertido de revisar, especialmente si la gala a la que atienden tiene una temática tan importante y diversa como lo es la influencia asiática en el vestir. Pero a ellas, parece importarles más la atención de los flashes (en realidad, a qué famosa no), queriendo casi emular el impacto mismo que Cher ya se llevó hace varias décadas atrás.
La selección de estrellas chinas, comandadas por una siempre elegante Fan Bingbing en Christopher Bu, Zhang Ziyi en Carolina Herrera y Carina Lau en Schiaparelli Couture, entre otras, llevaron delicados ejemplos de cómo no caer en el cliché de solo enfundarse en un disfraz de restaurant cantonés y al mismo tiempo, modernizar la mirada oriental. Para otras como Sienna Miller en Thakoon, Emily Ratajkowski en Topshop, Amal Clooney en John Galliano para Maison Margiela, Justin Bieber en Balmain o una impresionante Rihanna en Guo Pei, fueron las que siguieron la inspiración principal sin necesidad de tomarlo literalmente. Sarah Jessica Parker llevó todo al extremo con una exagerada pieza en su cabeza, mientras que Madonna, Katy Perry (ambas de Moschino), Anne Hathaway de Ralph Lauren, FKA Twigs y Robert Pattinson o la modelo Natasha Poly, se lucieron dando su propia visión de un traje de gala para la ocasión.
Fotos: Just Jared, TheFashionSpot, Instagram, Cosmopolitan.
