La identidad de una persona se forma especialmente durante sus años de adolescencia, y qué mejor que el lugar donde duerme, vive y respira sus gustos personales, para conocer más acerca de ella. Así pensó la autora Adrienne Salinger cuando decidió editar el libro “In My Room: Teenagers in Their Bedrooms” (1995), el cual ha tenido un gran éxito desde su publicación y se ha convertido en una manera efectiva de revisar la evolución de las necesidades y gustos populares de los jóvenes.
Dedicada a capturar momentos claves en la vida de adolescentes y personas en general, Salinger decidió seguir su aventura entrando en el santuario de cualquier joven: su propia pieza. Allí no solo se dedicó a tomar fotografías bajo el estado puro del desorden, la rebeldía o la adoración hacia alguna figura en posters, sino también a cómo se veía cada espacio con su propio dueño y creador. Así, el libro se convirtió también en una pieza especial para conocer psicológicamente a toda una generación encantada por el grunge, Michael Jordan, el skateboard o la violencia misma, todo mezclado con frases propias de cada participante.
Los retratos de esta fotógrafa siempre han estado conectados a diferentes etapas de la vida. Luego de este libro, Salinger editó uno titulado “Living Solo” (1999), donde recopila imágenes de personas que recién alcanzan su independencia económica, para seguir con “Middle Aged Men” (2007), donde simplemente retrata hombres en edad adulta. Con estos ensayos gráficos, Salinger ha ganado numerosos reconocimientos y por supuesto, ha contribuido dejando registro de una de las etapas más importantes en la vida de cualquier persona.
Fotos: Amazon, Ninety9 Notes, Vincent Borrelli, Adrienne Salinger.
