Aunque los dos se hicieron famosos en épocas un tanto distintas – Anderson en los ’90 y Doherty en esta década-, provienen de la escena rockera inglesa, esa que siempre innova con sus exponentes y que siempre tiene algo que decir en cuanto a estilo.
Mientras el ex – vocalista de “Suede” y ahora solista llevó la bandera de lo andrógino tiempo antes que Brian Molko y cía., fue la mezcla perfecta entre una pizca de glam y de sobriedad elegante pero transgresora, en una época en que las bandas eran más desprolijas en el vestir y en su música (grunge y sus corrientes) o estaban enfocadas en el estilo retro colorinche.
Por otra parte, Doherty se ha dado a conocer más por sus andanzas y escándalos que por su música, aunque gracias a las buenas críticas y adeptos de “The Libertines”, su vida como músico fue bien respetable. Continuó con “The Babyshambles”, anduvo y terminó con Kate Moss y la modelo Irina Lazarenau, pero es su ropa y su particular forma de vestir a lo chico malo elegante lo que siempre cautiva con su look.
Y aunque ambos son el lado opuesto de la moneda, se merecen el reconocimiento por llevar el look rockero a nuevos términos.
