Colaboración desde México por Isaias Delgado.
Desde México, el modelo Iram Murra nos habla de sus experiencias en el mundo del modelaje, tanto en su país natal como en ciudades como Shanghai o Nueva York, donde vive actualmente. Si bien nunca pensó convertirse en modelo, adopta esta vertiginosa carrera con una forma de vida más pausada y consciente.
¿Cómo comenzaste a modelar? ¿Antes de ese momento, sabías algo sobre el mundo de la moda, o soñabas con ser modelo?
Mi primer desfile fue a cuando tenía 13 o 14 años, y la verdad es que no quería hacerlo pero me acuerdo que me iban a pagar lo que mis papas me daban en dos semanas, como mesada para gastar en juguetes, así que dije que si. No tenía idea del mundo de la moda en ese entonces, yo quería ser algún abogado o político.
¿Qué significa el modelaje en tu vida?
El modelaje se ha convertido cada vez más en mi vida, ha tomado posesión de mis horarios y pensamientos, cada paso que doy hacia adelante es mas difícil, pero es más valioso, y sé que algún día llegaré a ser alguien que se reconozca con el paso de las futuras generaciones.
Entre los fotógrafos y portadas para las que posaste, ¿cuáles han sido tus favoritas?
Pues no me gusta tener favoritos porque eso es discriminar a los demás, pero me gusta mucho que haya tantos fotógrafos latinos en NY con los que yo he trabajo, eso me deja claro que nosotros los latinos tenemos mucha influencia en la moda globalmente hablando. Tenemos ese “picante” que la gente necesita.
¿Como fue la experiencia de vivir en Shanghái?
Shanghai es una ciudad mágica, llena de brillo y oportunidades. Por el momento creo que es mi ciudad favorita, al menos ese amor que le tengo a la cultura china y a su gente no me lo va a quitar nadie. Aprender un poco de chino mandarín para poder comunicarse y lograr entender más la vida diaria de este país tampoco está de más. He aprendido muchas más cosas de las que pensé en esta ciudad, y su comida es única, creo que es una de las cosas que más me atrae de hecho.
Háblanos un poco sobre tu faceta de Trainer en la agencia de Glenda Reyna.
Pues qué mejor manera de compartir tus éxitos que enseñándoselos a tu prójimo. La escuela en México me ha hecho crecer como una persona más íntegra. Al mismo tiempo que yo enseño lo que se necesita para ser un modelo internacional, voy aprendiendo también cosas rutinarias gracias a las palabras y acciones de mis alumnos. Hemos tenido alrededor de unos 300 alumnos, y hemos sacado a muchos top models como es el caso de Christian García, quien acaba de hacer la campana para Lanvin, en París.
Cuéntanos un poco de tu vida en Nueva York y sobre tu participación en el NYFW.
La vida en NY es una cosa de locos, correr de un lado para otro sin parar, y pensar en lo que tienes que hacer en la semana simplemente te deja sin aliento y sin energías, sin contar la vida nocturna que se tiene que vivir para tener el concepto completo de NY. Por lo mismo siempre es bueno un poco de meditación diaria y así tomar energías que se encuentran dentro de nosotros para sobresalir en esta selva pavimentada, en NY o comes o te comen.
Sobre tu proyecto de colaborador de la revista online Saracha, ¿qué puedes decirnos?
Es un proyecto nuevo al que me invitaron y la verdad me siento muy feliz de poder compartir mi visión a los lectores de la revista, porque más allá de ser un modelo, trato de expresar mi forma de ser. La idea es ser quienes somos y aprender a disfrutarnos. No duden en darle una leída a las notas que escribo de vez en cuando en Saracha!
¿Cómo ves el mundo del modelaje en México, comparado a Latinoamérica y el mundo?
La verdad es muy diferente, pero ahora estoy viendo que hay muchos diseñadores increíbles en Sudamérica con los que quisiera trabajar, y la moda Latina se está fusionando muy rápidamente con la moda internacional.
¿Lo mejor y lo peor de tu profesión?
Lo mejor a veces puede ser lo peor. En el mundo del modelaje tienes que madurar mentalmente muy rápido porque es un negocio donde necesitas ser un joven con alma de adulto. Al mismo tiempo, tienes que viajar muchísimo, eso es bueno siempre y cuando tu objetivo sea conocer el mundo, pero si tu objetivo es tener tu propia casa y tener una vida estable, entonces este negocio no es para ti.
Por último, ¿cuáles son tus planes para el futuro?
Por ahora mi plan es explotar esto del modelaje, pero ya estoy empezando a formar un negocio de importaciones internacionales; necesito un negocio que se pueda realizar a través de la computadora ya que viajo mucho. Pero cada día mis planes a futuro cambian: un día pienso que mi siguiente paso será en París, otro día pienso que mi siguiente paso está en Hong Kong, y así.