Hace 14 años atrás, el 2005, las ventas de materiales biológicos incluidos en los textiles para fabricar prendas de vestir representaron un 7% del total de la venta mundial. Hoy el valor de los materiales biológicos representan un aproximado de $77 mil millones. El mundo está cambiando; la demanda de productos está siendo sobrepasada por este consumo desmedido y avalancha de precios bajos y esta demanda mundial comienza a re formular y re pensar los suministros de la cadena y por supuesto, las inminentes necesidades ambientales que afectan de manera casi irreparables a nuestro medio ambiente.
Pero se está trabajando en ello, pues los tejidos sostenibles en su producción están ganando terreno a través de importantes iniciativas y ORG en la industria del vestir. Al igual que los bioplásticos que irán en aumento en un 169% (entre los años 2013 y este año que corre), se habla de revolución y no me refiero a una estilo propio de vestir sino que al crecimiento de textiles renovables un campo de explotación y adaptación para reducir el impacto ambiental. Los organismos y empresas reguladoras ya están manos a la obra, por ejemplo existe la sigla SAC que es la Coalición de Prendas Sostenibles que mezcla la producción de la industria del calzado, vestir y hogar en la que su herramienta de monitoreo se llama ÍNDICE HIGG, el cual evalúa a empresas ayudándolas con sus esfuerzos de convertirse más sostenibles, midiendo sus impactos en la producción a modo económico social y laboral de pequeñas y medianas empresas del mundo de la moda y decoración.
Por otro lado la BioCouture o la MicroCouture una nueva forma de mirar y vivir la moda enfocado a los nuevos materiales y capacidades. Están sustentados en la base de elementos y material sostenibles biológicos como las bacterias, agares, residuos de insectos, gelatinas, etc. Estos elementos tienen efectivamente un menos impacto ambiental y mejor aprovechamiento, ya que pueden reproducirse rápidamente. Las micro algas, la impresión textiles con pigmentos naturales, las máquinas de corte artesanal son una trilogía que se llevo a cabo un proyecto de laboratorio de investigación Alemán. Essi Johanna Glomb y Rasa Weber son las genias.
Las diseñadoras crearon una máquina de impresión de corte artesanal que les permitiera extraer los pigmentos y usarlos al mismo tiempo, una máquina de fácil uso y muy comercializable. Se estima que para el 2010, el mercado global crecerá a $250 mil millones y para el 2030, un tercio de los productos químicos y materiales se obtendrán de ingredientes biológicos.