La última vez que vi una de las películas de Bridget Jones tendría como 20 años, pero aún las recuerdo como si fuese ayer. Aunque Bridget (Renée Zellweger) nunca fue un icono de moda, ni el mejor ejemplo de cómo llevar tendencias, este personaje nos dejó muchas lecciones, y hasta eliminó algunos mitos sobre la soltería.
Las cintas de Jones (Bridget Jone´s Diary y The Edge of Reason) están basadas en los best sellers de Helen Fielding, una escritora que trató de reflejar el diario de la mujer de 32 años cuya vida amorosa siempre está en crisis, no encuentra a su príncipe azul y siempre fantasea con el hombre equivocado. Aquí algunas de las lecciones de este icono de la cultura femenina.
Si no funciona el plan A y el B, recuerda que siempre tenemos un C: Bridget Jones nos enseñó que no es tan malo pasarlas a solas, eso si, que no falten los chocolates, una buena comedia y un grueso edredón.
El alcohol es bueno… hasta que te hace decir o hacer estupideces. Cuando te sientas ebria, ni te muevas. Eso de llamar al ex o al chico con el que sales para decir cuanta cosa se te pase por la cabeza, eso es nunca termina bien.
Una mujer precavida vale por dos. Nunca supongas, dalo por hecho y siempre pero siempre sal preparada, sobre todo cuando tengas una cita.
Cuando estés triste, canta. Cuando estés alegre, canta. Además de resultar desestresante, cantar te ayudará a liberarte.
Cuando realmente te quieras enamorar, abstente de salir con chicos alcohólicos, con miedo al compromiso, megalómanos o pervertidos. Definitivamente con esos hombres nunca llegas a nada y además te hacen perderte de los pretendiente que si valen la pena.
Actitud ante todo. Si el atuendo falla o si metiste la pata con algún comentario, mantén firme tu actitud.
Todos tenemos defectos pero no se vale ir por la vida diciéndoselos a todo el mundo y mucho menos al tipo que te gusta.