Introdujo la minifalda aun cuando la opinión pública le dio la razón a Mary Quant en los ’60. Pero desde hace rato, el francés André Courrèges experimentaba con largos en la ropa femenina, con minimalismo limpio y clínico que de alguna manera se convirtió en la identidad propia del futurismo de revistas y hasta películas, por allá por los ’60. Luego de décadas como una figura de culto en la moda, hoy falleció el diseñador a los 92 años aquejado por su lucha contra el mal del Parkinson.
Aprendió con el mejor todo sobre el arte de confeccionar prendas pero además, ir más allá imponiendo siluetas y originalidad antes que otros de sus contemporáneos. Fue Cristobal Balenciaga quien lo entrenó antes que en 1961 lanzara definitivamente su casa de moda, con la cual hizo soñar a la mujer con prendas ligeras pero complejas, provocativas pero al mismo tiempo infantiles. Fue ese mismo aire juvenil el cual detestó Coco Chanel, diseñadora que creía que Courrèges vestía a las mujeres como niñas. Pero al francés nada de eso le importó y en 1964 introdujo su colección Moon Girl, llena de materiales novedosos como el plástico y PVC, colores fuertes como el rojo en contraste con el blanco y una fiesta lunar que se anticipó a la fiebre Space Age de su era, que marcaría su punto más alto con la llegada del hombre a la Luna en 1969.
Diseñadores posteriores como Miuccia Prada, Alexander Wang y otros han copiado su fresco punto de vista que se mueve entre el minimalismo, sus homenajes a la cultura asiática y por supuesto, su uso de materiales inusuales. Courrèges también puso en el tapete la utilización de metales en bustiers y llevaría a famosas como Jackie Kennedy, Catherine Deneuve y otras a usar sus prendas. Las revistas de los ’60 vibran con editoriales llenas de sus propuestas, con esas mujeres niñas de pecas pintadas y pelucas de colores, estilo que pronto sería replicado en publicaciones posteriores. Luego de varios años en la oscuridad, la marca renació hace poco tiempo bajo el nombre de Courrèges y con la dirección creativa de Sébastien Meyer y Arnaud Vaillant, mientras la memoria y bocetos originales de esta marca al fin descansan.
Fotos: Puretrend, Archivo MartiriosWay.