Desde que Lupita Nyong’o irrumpió el 2013 con su papel estelar de “12 Years a Slave”, ha demostrado ser una fuerza en el mundo del cine y la moda por igual. La actriz nacida en Ciudad de México y la portada de Vogue de enero 2018, estudió en la Escuela de Drama de Yale, donde obtuvo una maestría en 2012 y pronto se convirtió en una triunfante estrella.
Su primer gran momento de moda fue en el Festival Internacional de Cine de Toronto 2013, donde Nyong’o llevó un vestido blanco de Prada con pliegues de acordeón y acentos de color dorado en el escote. La sutileza y la simplicidad comenzaron a definir el estilo personal de la actriz. El año siguiente, Nyong’o se presentó en los Premios Globo 2014 con un vestido de Ralph Lauren; no solo comenzó su carrera como una contendiente talentosa, sino también como una nueva voz del pensamiento moderno en Hollywood.
Nyong’o continuó experimentando con tonos vívidos de color esmeralda como el Christian Dior Couture que eligió para los Premios BAFTA 2014 y vestidos ingeniosos, incluido el modelo gráfico de Chanel que usó para los MTV Movie Awards 2014 y el Fausto Puglisi que llevó a el Festival de Cine de Maui más tarde ese mismo año, pero siempre se mantuvo fiel a su estilo.
Actualmente, Nyong’o se prepara para promocionar su nueva película “Black Panther” y con la temporada de premios a la vuelta de la esquina, podemos concluir que su aspecto va a dar mucho de qué hablar, ya que siempre es un acierto en la alfombra roja.
Fotos: Vogue