Nadie, ni siquiera Calvin Klein logró moldear tan bien el minimalismo en la moda como Helmut Lang. El diseñador -que junto a Jil Sander se convirtió en todo un pionero en los ’90-, hoy inspira desde Raf Simons hasta Alexander Wang, y se retiró de la esfera el año 2004, luego que el grupo Prada comprara su empresa en 1999. Sin embargo, el recuerdo de los años de gloria bajo la publicidad de modelos a cara deslavada, llevando sus chaquetas y pantalones ligeros en blanco y negro, siempre aparece, especialmente ahora luego que el 2011 renaciera su marca de la mano del New York Fashion Week, luego del último desfile en el año 2006.
Angela Lindvall, Bridget Hall, David Sims, Kate Moss y Shalom Harlow, entre muchos otros emblemáticos rostros fuera y delante de las cámaras, lucieron los diseños originales que Lang lanzó a la fama a principios de la década del grunge, concibiendo un look que calaría fondo no solo entre las mujeres, sino también en los hombres. De hecho, varios le atribuyen el propiciar la era de los hombres bien arreglados rompiendo esquemas anteriores, donde simplemente llevar pantalones y camisa del mismo color podía convertirse en un referente del buen vestir.
Lang nació en Austria, y fue no solo líder en cuanto al estilo minimalista, sino también fue el primer diseñador que transmitió un desfile por Internet. En 1998 decidió que todo el mundo podría ver sus diseños, y por esa fecha también se apartó del resto de los esquemas al mostrar sus colecciones tres días antes que NYFW o Milán. Además, colaboró codo a codo con la artista Jenny Holzer creando desde vitrinas hasta anuncios publicitarios, y por estos días disfruta de un giro en su carrera: convertido en artista plástico, ha expuesto en varias galerías europeas, mientras las piezas de ropa que creó desde 1986 hasta 1999, son codiciadas prendas vintage que llevan las amantes de su estilo hasta en la alfombra roja.