Por Daniela Alcardi (@daniaicardi_)
Hay personas que nacen sabiendo qué quieren hacer con su vida. Catalina Salinas es una de ellas. Desde que tiene memoria, esta joven ha soñado con dedicarse a la orfebrería. El amor que siente por las joyas es inexplicable, y también inevitable. Es algo que llegó a ella de manera instintiva y no hay forma de apagarlo. Incluso, confiesa que no puede imaginar una vida sin dedicar su cuerpo y alma a la orfebrería. Las joyas de Catalina (@by.catalinasalinas) están compuestas por contrastes perfectos. Se mueven entre el minimalismo y lo llamativo, entre lo tradicional y lo moderno, entre la historia y las tendencias. Su estilo se nutre de los opuestos. Con más de 12 años de experiencia, esta orfebre chilena ha recorrido el mundo para perfeccionar su técnica en este trabajo milenario. Como resultado de estos viajes, sus piezas tienen una gran influencia de la cultura precolombina y latinoamericana.