Hace rato buscaba sumergirse más y más en el mundo de la moda como parte del escuadrón creativo que tiempo después comandaría. Luego de un largo tiempo como diseñador freelance –“no estoy para ser asistente”, dijo antes de irse de Jean Patou–, Karl Lagerfeld tomó control de la casa Chloé en 1971. Pero en 1983 el desafío sería triple: además, se encargó de la creatividad tras la marca Fendi y le ofrecieron ser el diseñador de alta costura de Chanel, puesto que aceptó. Así nació en 1983 la primera colección del llamado Kaiser para su eterna marca.