Dice que en su estilo conviven una mezcla de estéticas. “Soy un poco dandy, crooner, medio gitanesco, pimp y rockero”, lanza de entrada Cosmo Gonik, actor de profesión que ha sabido cultivar un look atrevido y característico y que gentilmente nos mostró su clóset para compartir con ustedes todas sus piezas únicas. Su armario está compuesto mayormente por prendas vintage que han sido recolectadas en sus distintos viajes, especialmente de su larga estadía en Francia, donde dice haber “educado el ojo”, en términos estéticos. Leer Más
Colección Bernard Hewitt 1916 (www.fineanddandyshopblog.com)
Un hombre solitario, millonario y ataviado con los más finos trajes confeccionados por el diseñador Ralph Lauren; ternos rayados, de color rosa acompañados de pañuelos y un peinado perfectamente acomodado para ir a la par con su estilo. Así podríamos describir a Jay Gatsby, el personaje encarnado por Robert Redford en la película “The great Gatsby” de 1974, la misma cinta que este año tendrá a Leonardo di Caprio en su remake de Baz Luhurman. Bajo esta descripción, podemos identificar a uno de los grandes estilos que se asoman en el imaginario masculino: el dandy. Concepto nacido a mediados del siglo XVIII, se le suele relacionar con aquellos hombres que se preocupan en extremos de su apariencia, viviendo bajo el lema del refinamiento y la ocupación de hasta el más mínimo de los detalle estéticos en su quehacer diario.
La chaqueta la compré en una feria, el body en una tienda de ropa usada de Valparaíso, el short en GAP, las pantys en el Mall Chino y los zapatos en Basement. El gorro era de mi papá y los lentes son Forever 21. Escucho a Siouxsie and the Banshees, me gusta el diseñador Hussein Chalayan y uso el perfume
El año 2002 fue estrenado un musical en Broadway inspirado en la escena New Romantic de los años ’80; fue protagonizado por Boy George, quien se encarnaba a si mismo, apareciendo junto a otros personajes inspirados en Steven Strange y Leigh Bowery, el artista y creador del original club Taboo, que le dio nombre a la misma obra. Bowery se convirtió en un personaje icónico, gracias a su versátil manera de aparecer como modelo, promotor de artistas, estrella pop e incluso diseñador de moda, llegando sobre todo, a establecerse como un referente gracias a su particular look. Gracias a él, Taboo se convirtió en la cuna más importante de la escena nocturna inglesa de los ’80, y Bowery en uno de los líderes de la cultura gay.