María Aparicio Puentes egresó de la carrera de Arquitectura de la Universidad de Chile para luego viajar a España y realizar un máster en Diseño Urbano en Barcelona. Una vez allí, comenzó a crear sus propias obras, que consisten en imágenes en blanco y negro intervenidas con hilos de colores, que a través de la geometría y una disposición en especial, invitan a ver algo que no vemos a simple vista: las tensiones que existen en un cierto espacio. Si aún no conoces el trabajo de esta chilena, te invitamos a conocer sus propios procesos e inspiraciones en la siguiente entrevista.
¿En qué te aporta la carrera de arquitectura para tu trabajo actual?
Creo que la arquitectura me ha ayudado a desarrollar cierta sensibilidad frente al entorno, en sus aspectos físicos como inmateriales. Poner más atención a las relaciones de los elementos en el espacio. Pensar por ejemplo qué ocurre si un árbol ubicado en la mitad de un parque se desplaza o imaginar si desaparece. También el poder generar ejercicios mentales en relación a la escala, proporción o tensión entre la gente, edificios y cualquier otro objeto, inquietudes que traspaso cuando intervengo una imagen.
¿Cómo nació la idea de fusionar bordados y fotografías? ¿Y desde cuándo?
Nació de una manera bastante espontánea, en Abril del año 2011 estando en Barcelona. Recuerdo que en ese tiempo estaba por terminar mi máster en un periodo donde había muchas preguntas respecto a mi futuro en esa ciudad. Coincidió también que estaba con una gran energía para hacer nuevas cosas, emprender nuevos proyectos. Fue en una tarde, mientras ideábamos con Claudio (su pareja) el proyecto de Panamericana, que me puse a coser una imagen sin pensar en el resultado. Me gustó la idea del collage, de trabajar el relieve, el poder ir haciendo y deshaciendo puntadas. Vi en esa operación mucho potencial en donde mis inquietudes plásticas de proyectos e ideas anteriores, encontraron un nuevo campo de exploración.
¿Qué dimensiones tienen tus trabajos?
Usualmente, suelo trabajar imágenes de pequeño formato (15×20 cms., 30×40 cms). También he trabajado en soportes más grandes (100 x 100 cms.). Como meta para este año, quiero explorar la posibilidad de intervenir espacialmente una imagen.
Tu trabajo se inclina básicamente en el uso de fotografías en blanco y negro que contrastas con hilos de colores fuertes. ¿Por qué, qué te nace de esta combinación?
Me gusta trabajar sobre blanco y negro básicamente por dos razones. Primero, para no sentir que estoy trabajando con la imagen original ni tener la necesidad de mantener esta realidad (cosa muy difícil después de imprimir y escanear una imagen). En este sentido me he visto muy complicada en algunas colaboraciones que he llevado a cabo en el momento en que me han pedido mantener intacta la imagen original. Es muy difícil, por no decir imposible. Suelo sugerir que lo mejor es trabajar desde el principio sobre blanco y negro, entendiendo que es una nueva imagen basada en la original.
Segundo, para poder hacer más evidente la intervención con hilos sobre la imagen a través del contraste del color y material, enfatizando las relaciones espaciales que busco hacer visibles.
¿Cómo es tu proceso creativo? ¿Qué te inspira?
Que me inspira? Toda lo que constituye la vida! Visitar lugares y conocer personas que jamás pensé encontrar, ver una película, ir a una exposición. El diseño en todas sus manifestaciones, la música, la artesanía, las plantas, los animales, el amor, salir de paseo. Comenzar hacer algo y ver qué resulta. Creo mucho en el inspirarse haciendo, probando, sintiendo.
Mi proceso creativo es simple. Sólo necesito sol, calma, motivación, una mesa, imágenes, hilos, agujas, tijeras, regla, lápices y scotch. Cuando ya elegí la imagen sobre la cual trabajaré, comienzo a imaginarme como podría ser la intervención. Tiro hilos encima de ésta y en paralelo, voy probando la combinación de colores. Una vez convencida, hago los agujeros en los puntos determinados durante el proceso anterior y comienzo a darle forma a la idea.
¿Dónde trabajas?
Acá en casa, en el living. Me gusta ese lugar porque está la mesa, el sol, la música, las plantas y la tranquilidad.
¿Las fotografías que empleas son tuyas, de terceros?
La gran mayoría son de terceros, a partir de colaboraciones que se han gestado. En el último tiempo, he trabajado mucho sobre las imágenes que toma Claudio. También he intervenido algunas de mi autoría, por ejemplo esta.
¿Qué evoca la geometría en tus obras?
Más que evocar lo que busco es hacer visible algo que subyace en la imagen. Algo que está ahí.
¿Sientes que la moda tiene un espacio especial en tu trabajo? ¿Qué temas te gusta abordar?
Si claro, aunque en todo caso, prefiero el término vestuario más que moda. Me gusta lo que sugiere lo envolvente, los pliegues, las direcciones o formas. Otros temas que me gustan abordar son la arquitectura, el espacio entre las personas, la ciudad, entre otros.
¿Dónde aprendiste a bordar? ¿Fue el crochet, el punto cruz o el tejido a palillo alguna de las técnicas que te llevaron a hacer lo que haces hoy?
Aprendí a bordar entre lo que me enseñó mi profesora de técnico manual y mi mamá. Aun tengo un trabajo que hice a los 10 años. Un paisaje bordado que aún conservo. Me encanta. No sé si ese aprendizaje me influyó de manera directa en lo que trabajo hoy, pero creo que se configuró como un aprendizaje, como algo aprendido que estaba ahí guardado. Considero que lo que más me motivó llevar este trabajo adelante, fue hacer algo que me gustara y sobre todo, persistir. Seguir creando, ampliando horizontes, escalas e indagar en nuevas exploraciones formales.
¿Qué proyectos tienes para este año y para más adelante?
Ahora mismo estoy ideando un nuevo proyecto que enviaré a Madrid en el contexto de una invitación hecha por el colectivo La Carnicería. En paralelo, avanzo con el nuevo proyecto que estamos desarrollando con Claudio que aunará lo que hemos venido realizando con nuestros proyectos Panamericana, Time of the Thieves y los que estamos gestando a futuro. En Agosto comenzaré un curso de joyería textil lo que me tiene muy entusiasmada y con ganas de llevar a cabo un nuevo proyecto de intervención con hilos que explore relaciones espaciales a escala 1:1.