La ropa usada para mí representa la unión de distintas épocas, texturas y marcas que se transforman en un registro de lo inimaginable, construyendo una gran enciclopedia de marcas nuevas, jamás vistas o escuchadas. Las prendas adquieren un valor histórico, en mi clóset existen marcas que se repiten y otras que me sorprenden por sus hazañas en el diseño.
Para mí la elección tanto de una prenda cómo el posible encuentro con ésta, concierta un grado de visión con respecto a la ropa y sus posibilidades de insertarla tanto en nuestro clóset cómo en nuestra vida. Mirar es un ejercicio esencial para iniciar una búsqueda exitosa; cuando tomamos una polera en medio de un montón de cosas o las miramos a la luz de otras prendas, mayoritariamente encarecemos el valor de lo escogido. Entonces, es esencial que tomemos la ropa y la miremos con distancia, tiempo y proyección en su relación con otras prendas y futuros outfit.
Creo que lo más gratificante de estas búsquedas es el valor de lo particular, del asombro por las cosas encontradas, de lo impensado y de las historias adheridas a nuestra ropa, quienes vivieron un pasado y hoy siguen existiendo inmutables en el tiempo. La ropa usada es la resignificación de una prenda que tuvo una historia gloriosa o quién sabe si antes de ser nuestra, fueron valoradas o no, en su momento.
Existen muchas tiendas de ropa americana en Chile y en cada una de sus regiones. Por mi parte, siempre he buscado en ciudades pequeñas ubicadas en la Región del Maule, recorriendo Cauquenes, Parral o Linares. Gran parte de mis tesoros han aparecido en ciudades apartadas de Santiago pero aquí también recurro a los viejos datos pero cumplidores como es la calle bandera o las americanas que rodean plaza de armas.
Así, el gusto por lo usado, por aquello que viene viajando en el tiempo, es parte de un patrimonio que se guarda, protege y valora. En las siguientes fotografías les mostraré algunas adquisiciones, como el abrigo de color rosado furioso con detalles en terciopelo, una polera azul con estampados en glitter brilloso o un faldón con figuras casi op-art. Estas prendas son parte de un conjunto universo que es mi clóset y que seguirá expandiéndose hasta llegar a convertirse en un pequeño museo de mi gusto personal.