Ella se auto-define como una crítica de moda y escritora de estilo. Es la editora de moda del Washington Post y junto a Suzy Menkes, Cathy Horyn y otros, pertenece al selectro grupo de individuos que son respetados por lo que piensan y dicen. En 2006 ganó el premio Pulitzer en la categoría “Criticism” y este mes acaba de publicar un libro sobre la primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama.
Nativa de Detroit, Michigan, fue valedictorian en el Renaissance High School en 1982, se graduó de la Universidad de Princeton en 1986 y tiene un master en periodismo de la Universidad de Michigan en Ann Arbor. Después de trabajar en el Detroit Free Press por alrededor de 7 años, mantuvo posiciones en el San Francisco Chronicle y en la revista Vogue. Ahora lleva en el WPost más de 10 años y de ha dedicado a cubrir en parte, los atuendos de políticos.
En agosto 2009, ella había señalado que Mrs. O se veía “demasiado común” al usar shorts durante sus vacaciones. Y que el escote de Hillary Clinton era pertubador como el cierre abierto del pantalón de un hombre. También encontró desatinado una parka verde del vice-presidente Dick Cheney en el aniversario 60º de la liberación de Auschwitz por no ser solemne y también juzgó a la mujer y los hijos de un nominado a la Corte Suprema, por parecer “un trío de huevitos de pascua”. ¿Ven? La política también puede ser divertida.
