Casi como si fuera un homenaje póstumo de la moda en clave de color, Prince emergió de alguna manera en las pasarelas que hemos visto estas semanas a través de su amado púrpura. A través de varias tonalidades de púrpura, la moda de Paris, Nueva York y otros rincones decidieron mostrar ropa femenina de fiesta, otra más ligada a diferentes subculturas y hasta trajes de estilo alternativo, las mismas que serán parte de la tendencia que veremos en los próximos meses.
Nueva York consagró varios nombres pero ninguno como Marc Jacobs. El norteamericano se alimentó de los bronies y con ello, el púrpura se hizo presente en vestidos y trajes, hasta abrigos que llevaron Gigi Hadid e Irina Shayk. DKNY y Anna Sui revalorizaron el color en claves muy diferentes: una sport gentileza de los diseñadores tras Public School y la otra un boho clásico eterno.
Si pasamos a París, allí nos topamos con una verdadera explosión de púrpura en todas sus formas. Nina Ricci junto a Guillaume Henry, retomó el glamour nocturno lanzando atuendos en combinación con varios tonos de nuestro color favorito. Balenciaga mezcló leggings y blusas de corte ochentera, también apoyado en el púrpura. Carven, Elie Saab, Junya Watanabe y hasta Fenty x Puma, la colección de Rihanna, mantuvieron en sus propuestas looks que compartieron el color, mientras Rick Owens se matriculó con una colección de ensueño artístico que incluyó un traje de abrigo y túnica vaporosa en púrpura suave.
Fotos: Runway.