Esta marca de vestuario infantil no teme en usar el negro o el blanco, colores que corren lejos de la ropa de los más chicos por miedo a ensuciarse. En cambio, Dino e Lucía, la firma francesa que propone colecciones para niños de entre 4 y 14 años ofrece al mundo colecciones sencillas, chic y muy sobrias, como si se tratara de una elegante marca que viviera de Fashion Week en Fashion Week.
Sieglinde, la diseñadora tras la marca, se formó en la Escuela Jeoffrin Byrs International para estudiar Diseño de Vestuario, decidida a convertirse en diseñadora de vestuario femenino y establecer su propia tienda. Pero llegó el amor, y Sieglinde armó su propia familia en la que tuvo dos hijos, cosa que redireccionó su interés por la moda para dedicarse de lleno al vestuario infantil. Así es como en 2004 inauguró su primera boutique infantil en París, logrando un éxito rotundo entre las mamás que buscaban diseños más sofisticados para sus hijos.
La impulsora de la marca se preocupa para cada una de las piezas de Dino e Lucía que los detalles y las terminaciones sean impecables, de primer nivel, con un espíritu de perfección que recoge de su madre, quien trabaja para la casa de modas de Balenciaga. Encajes, terciopelos, cueros, lanas, sedas, viscosas y tul, entre otros variados materiales, se unen a la idea de cortes simples, de estilo preppy y al mismo tiempo femenino, convirtiéndose en una opción perfecta para niñas como Sasha y Malia, hijas de Barack Obama, quienes ya poseen vestidos de la marca francesa en sus clóset.